Capítulo 22: "Beso ebrio"

1.6K 184 186
                                    

«Entonces... te gusto»

«¿Cómo pasó?»

«Cuando fuimos juntas al centro comercial»


Tal es el caos en mi mente que la simple idea de tragar saliva se convierte en una misión sumamente complicada e imposible de realizar.

Para mi estupenda suerte no he bebido lo suficiente como para creer que lo he imaginado, pero no estoy segura de cómo sentirme al respecto.

—Espero esta vez sí lo recuerdes. —Y para rematarla, sonríe.

Puedo ser olvidadiza, pero dudo que vaya a olvidar algo así.

—Jack...

—Está bien, Amelia, ya sé lo que dirás. —Su mirada cálida parece centellear como un par de estrellas.

—¿Estás ebrio?

—¿Qué?

Debe ser la única explicación. No concibo la idea de que un Jack sobrio se atreviera a hacerle eso a mis labios puros.

—No lo estoy. —Intensifica su sonrisa al punto de reírse, y me río por contagio—. Al menos no más de lo que tú estás.

Me dejo de reír.

—Yo no estoy ebria —aseguro.

—¿No? —Arruga la frente, como si no se lo esperara—. Significa que estás...

—Superconsciente. —Asiento.

—Creí que...

Frunzo el ceño, y sospecho lo que está pensando.

—¿Me besaste porque creíste que estaba ebria? —Enarco una ceja acusadora.

—No, no. —Sacude las manos con nerviosismo—. Creí que estabas ebria porque solías estarlo seguido.

—¿Dices que tenía un problema con la bebida? —Frunzo levemente el ceño, un poquito ofendida.

—No, cielos, no. —Se levanta y toca su nuca, y su rostro es una mezcla entre horror y asco—. No se supone que debía ser así, en serio creí que estabas ebria.

¿Bebía tanto en el pasado?

Me toco el pecho al pasar por mi mente el recuerdo de mi padre y esa fea etapa con la bebida.

—Escucha. —Se arrodilla y me sujeta de los brazos, su mirada intensa no me permite apartar la vista a otro lado—. Estoy aterrado. —Respira por la boca, agitado—. No quiero volver a perderte. —Respira hondo—. Contigo a mi lado siento que soy una buena persona, y... —Sonríe—. Todo lo que he conseguido no vale nada si tú no estás en mi vida. —Se muerde el labio—. Si me dieran a elegir... te elegiría a ti.

Tanto mi boca como mis ojos se mantienen abiertos.

¿Qué chichi está diciendo?

¿Aló? ¿Conciencia? ¡¿Aló?!

—Y entendí... —Ah, aún no termina—. Que así sea como amiga o como lo que sea... me basta, mientras sea lo que quieras.

Lo que quiera, ¿eh?

¿Eso significa... que puedo salir de la dogzone?

Aunque no estoy segura si seguía vigente esa zona, con el tema de volver a empezar es más seguro que ya no esté en ninguna... creo.

—Así que... depende de ti.

¿Qué depende de mí? Me perdí.

Eres desesperante.

¿Me van a dejar amar? [Presente MVDH #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora