Reencuentro con Sandra-san

276 46 25
                                    

El castaño se atrevió a abrir aquél baúl que desprendía fuertes y desagradables olores a putrefacción, pero también, podía percibir otros olores como ácidos desintegra hasta lo más potente.
Dentro del baúl, había sólo trozos de ropa, que parecían haber sido quemados hace casi dos décadas. Además de eso, pudo ver dos pequeños cuerpos humanos, que por alguna razón, se habían conservado en un estado momificado durante todos esos años. Era extraño. Apenas se podía apreciar la ropa rota de cada uno y pudo saber cuál se trataba de su cuerpo infantil.

Asesinaron a dos niños. Para salir de toda evidencia quisieron  desintegrarlos con ácido pero sólo terminaron momificándolos. Ahora este Hotel está maldito y mi alma en pena vaga por todo el lugar. Pero... ¿Qué hay de Hiro? ¡¿Por qué yo tuve un cuerpo, mi cuerpo y seguí creciendo mientras también estaba aquí muerto y por qué Hiro no?!—. Interrogaba decepcionado. Tenía sentimientos nunca antes experimentados. Sentía dolor, pena, furia, decepción, lástima, y por él mismo. No lo comprendía.
— ¡¡¡RESPÓNDAME ANCIANO!!! ¡¡¡¿POR QUÉ ME DEJARON CON UNA VIDA FALSA Y NO MUERTO COMO YA ESTABA?!!!

Tomó al anciano del cuello de su camiseta y lo empujó contra la pared. El hombre sólo lo miraba con lástima. Era difícil después de todo la situación de Shūji.

— ¿No te había hablado Shūji-kun de la clonación? Mi poder es...

— ¡¡¡ESO YA LO SÉ!!! ¡¡¡SÉ QUE FUI CLONADO CON MI PROPIO CUERPO EN ESE MOMENTO PERO ¿QUIÉN LO PIDIÓ?!!! ¡¡MIS PADRES SON UN ASCO DE PERSONAS Y YO SÓLO QUERÍA MORIR...!!

Lloraba. Gritaba. Cayó de rodillas al suelo y situó sus brazos y rostro a éste para seguir llorando exigiendo explicaciones. El pequeño Shūji se acercó a él y posó su mano sobre su espalda, dando pequeñas palmadas a su yo del futuro.

— Dazai-san, aún puedes investigar el caso—. Animaba el niño.

— No necesito investigar nada, niño. Yo... Recuerdo todo incluso después de morir... El maldito de Aozawa me acosó e intentó abusar de mí... Para que yo callara me inyectó seis frascos de ácido mortal y todo me empezó a quemar por dentro... Después avisó a Tsushima que yo no despertaba, ni estaba respirando, así que mi tío, el Detective Dazai fue a rescatarme porque simplemente pasaba por el lugar... Cuando los Dazai se enteraron de mi muerte, el Detective pidió a su hermano, mi actual padre, que me llevaran a la 124. Eso fue antes de avisar mi desaparición el mismo 19 de junio. En la habitación, me rociaron con ácidos de todo tipo para desintegrar mi cuerpo. Escuché una conversación entre los hermanos Dazai sobre Hiro, el mismo Detective tuvo algo que ver con la muerte de su hijo, o eso es lo que pienso... Los Detectives sabemos asesinar y ocultar crímenes porque nos dedicamos a lo contrario... Al parecer un accidente con Hiro salió de sus manos. Antes de rociar mi cuerpo con esas sustancias, ví al anciano. El anciano me clonó exactamente igual y me inyectaron algo para que despertara... Todo era tan diferente cuando desperté en casa de los Dazai... Pero ahora ellos se han vuelto mi mayor temor.

Explicó.

🌟

HORAS MÁS TARDE...

Decidido a revelarlo todo, aún cuando tenía pocas pruebas y casi inválidas por tantos años, Dazai fue a casa de los Tsushima luego de hacer una llamada a Chuuya y asegurarse de que estuviera bien.
Debía reencontrarse con esas malas personas que lo vendieron cuando apenas tenía cuatro años, y todo lo que esa venta trajo de consecuencias, su muerte.

Al entrar a la mansión Tsushima, pudo ver a una mujer de aproximadamente 70 años, que consolaba a la señora Tsushima, ambas lloraban.

CASO 105 [SOUKOKU]Where stories live. Discover now