Cuadro Amoroso Del Shipp De Luka Y Marinette.

9.

*especial ship*

—¿Dónde se supone que está este gato tonto? —Ladybug empezaba a cansarse moviendo su pie en señal de impaciencia; nuestra heroína moteada estaba sobre la torre Eiffel, el punto donde siempre se reunían ambos héroes para hacer su ya acostumbrado patrullaje nocturno, Ladybug consideraba al minino como alguien puntual apezar de las bromas que le hacía, pero la noche de hoy estaba demorando más de lo habitual.

Luego de esperar un buen tiempo el sonido clásico de la arma del gato negro le dió la señal de que estaba a punto de llegar. Ladybug no se aguantó las ganas de regañarlo.

—¡¿Acazo sabes qué horas son?! ¡Chat ya hablamos antes de lo importante que es la puntualidad! Y dime... ¡¿Qué es lo que...

Marinette volteó encontrándose con LUKA EN EL TRAJE DE CHAT NOIR, no podía ser, su mente no daba a cabida lo que sus ojos veían.

—Buenas noches Ladybug... —aunque sus intenciones no eran coquetear en ningún momento, su tono de voz sonó galante, cosa que hizo sonrojar a la azabache—. Perdón por tardar, pero como verás... yo no era quien debía venir —Luka se alejó para señalarse completo haciendo alusión a la nueva vestimenta que esta noche portaba, Marinette tragó saliva, sus ojos no paraban de recorrer el cuerpo del guitarrista y no se tomaba el trabajo de disimularlo.

Luka lo notó y sonrió adoptando una pose más coqueta, moviendo su cola como juego.

—¿Me veo bien no? —Marinette se sonrojó a más no poder, Luka la miraba de una forma indescriptible, algo que nunca antes había hecho con ella pero que sí había visto incontables veces en el minino rubio de ojos esmeraldas.

—Luka, creo que las costumbres de Chat se te han pegado —dijo Marinette, desviando la vista aún sonrojada; Luka parpadeó repetidas veces antes de darse cuenta de la atrevida pose que estaba haciendo frente a Ladybug.

—Hay no... lo siento, perdóname Ladybug, ¡desde ahora prometo que nunca más le haré otro favor a ese gato! —Luka se acercó para disculparse pero la azabache se alejó de un salto.

—No te preocupes..., no pasó nada... ahora... podemos empezar con el patrullaje, yo... yo voy por aquí y tú por allá, no es necesario que nos veamos al terminar, ¡adiós...! —Ladybug lanzó su yoyo y salió volando aún sintiendo un gran calor en su cara. Luka la miró hasta que desapareció por la lejanía; se miró en el traje de gato negro gracias a un conveniente espejo que estaba ahí y formó una sonrisa en su boca.

No se veía nada mal.

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Espero les guste, si fué así denle una estrellita y comenten, nos vemos en otro capítulo, bye.