De cabeza; Trueplik

14.

—Sigo acá eh, solo les aviso —Se quejó Manuel sarcásticamente, pero sin diversión.

Estaban con Valentín y Daniel mirando una película en su casa, hasta que a Dani le dio pena la parte en que el novio de la chica moría y entonces Valentín fue a su rescate. Eran besitos en un principio y ahora Manuel apenas los miraba porque con escucharlos ya era suficiente. Daniel estaba sobre Valentín mientras que este lo besaba acaloradamente y pasaba con un tanto de desespero las manos por el torso de su chico.

—Boludo, si quieren coger váyanse al departamento ese que querían —Dijo—. No, ¿Saben qué?, me voy yo

Al pronunciar eso se paró del sillón y salió molesto de su casa, dejando a los otros dos confundidos.

—Sip, yo también me voy —Dijo Ania tomando una campera en sus manos—. Les prestaría mi pieza porque está lejos de la de Martín pero quiero dormir tranquila por las noches

Manuel iba caminando a paso rápido, estaba molesto, pero no con Valentín y Daniel, menos que se estuvieran besando, era por sus padres, estaban más distantes que nunca y Abian pasaba ignorándolo.

Igual era Mateo, no salía un segundo de su cabeza y que sus dos amigos se hayan estado besando solo le recordaba al beso que le quiso dar él a Mateo en el baño, dolorosamente rechazado.

—No camines tan rápido que Usain Bolt no soy

Se giró y era Daniel. Le extrañó un poco, pensó que Valentín lo pudo haber ido a buscar pero no Dani. Se llevaban bien pero con el que tenía más confianza, por obvias razones, era el rubio.

—¿Qué pasa Dani?

—¿Te molesta que esté en tu casa? —Preguntó Daniel, sin rodeos.

Manuel lo miró extrañado y negó rápidamente con la cabeza. Obvio que no era así.

—Entonces, ¿Qué pasa?, ¿Tenés algo?

—No Dani, nada que tenga que ver con vos, tranquilo —Aseguró, para dejarlo tranquilo.

—¿Con Valen?, decime, ¿Te gusta Valen?

Manuel quedó perplejo. Hasta dónde llegaban sus idioteces.

—¿Pensás que me gusta Valentín?

Daniel asintió con un pucherito.

—Soy un boludo, no quise que pensaras eso y te juro que no es nada que los involucre, no sé porque me las agarré con ustedes

Daniel se acercó a él y lo abrazó. Le costó un poco reaccionar pero cuando lo hizo correspondió de inmediato. Los brazos calentitos de Dani casi lo dormían, estaba sintiéndose mejor.

—No sé qué problemas tenés y no voy a pedirte que me digas pero Val siempre me dice que mis abrazos le reinician la vida —Dijo Dani tiernamente, sin soltarse del abrazo—. ¿Te sirve a vos?

Manuel sonrió. —Creo que Valen se ganó la lotería con vos, sos mágico

—¿Mágico por que soy un ángel?

—Los gnomos también son mágicos Dani —Se burló, ganándose un merecido golpe en las costillas.

—Respétame, soy mayor que vos pendejo

Ambos rieron después de eso.

Volvieron juntos a la casa y Valentín los quedó mirando confundido cuando entraron.

—Te voy a ahorrar preguntas. Mientras vos ibas al baño fui por Manu —Dijo Daniel, adivinando lo que iba a preguntar su novio.

—Bue, me descuido dos minutos y ustedes me pueden hacer cornudo