CRIMINAL | Sherlock Holmes BBC |

Capitulo 1

Luego de un horrible viaje de más de 10 horas, llegué al complejo de apartamentos en el auto que me habían asignado en cuanto llegué a Londres.

Alllegar a mi apartamento, como de costumbre, encontré varios archivos esparcidossobre la mesita auxiliar de la sala.

Usualmenteyo era enviada a eliminar cualquiera amenaza, sin embargo, esta vez solo haríavigilancia. No estaba muy segura del porqué de enviar a una de sus mejoresagentes, si cualquier incompetente de la agencia podría ser suficiente paracumplir con el trabajo sin cometer ningún error.

Alabrir la primera carpeta me encontré con documentos detallados de cuatro personas:Sherlock Holmes, John, Mary y Rosamund Watson. Al igual que siempre me dabandatos sin relevancia que no podría usar para trabajar

Cuando abrí última carpeta me encontré con la fotografía de una pequeña niña de cabellos dorados. ¿Una niña? ¿Qué peligro inminente podría ser una niña para que mis superiores estuviesen tan agitados?

Las órdenes dadas hasta el momento fueron fijar a los objetivos, informar y esperar nuevas órdenes. Demasiado fácil, en comparación con otras misiones.

Deinmediato me puse manos a la obra, comenzando a trabajar en mi imagen, paraaparentar ser una mujer común que no podría representar ningún riesgo paranadie, de este modo podría lograr desviar cualquier sospecha hacia mi persona.Luego, lo mejor por el momento sería mantener un perfil bajo hasta conocermejor a los objetivos, para luego infiltrarme en sus vidas como una amiga más.

Me coloque un par de pantalones deportivos junto con una camiseta algo holgada y salí de lugar en dirección al 221B, Baker Street.

Al ser mi primera vez en tierras Londinenses necesitaba conocer el territorio, para no cometer ningún error en el futuro.

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Unasemana vigilando a estas personas y a pesar del poco tiempo pude notar queHolmes probablemente sea detective privado, puesto que su apartamento eravisitado por todo tipo de personas, pero mi teoría fue destrozada cuando llegóun hombre en una patrulla.

A pesar de no ser un objetivo, lo investigué, pues era el visitante más recurrente de Holmes.

Gregory Lestrade detective inspector del ScotlandYard, casado con dos hijos, probablemente su esposa lo engañaba. Al final dejéde lado esa investigación al no hallar nada interesante o importante.

Esmismo día al llegar a mi apartamento me encontré con un correo encriptado enforma de spam. En pocas palabras, decía que había un cambio de planes y que nosolo debía vigilarlos, sino que a partir del día siguiente trabajaría para elgobierno británico; además adjuntaron una dirección, que, según las instrucciones,sería mi nueva residencia.

Sin perder tiempo salí del apartamento con todas mi maletas hechas y me dirigí a aquella dirección, resultando ser una casa pequeña, pero acogedora; parecía simple, pero a la vez bastante lujosa.

Al entrar a la casa volví a encontrar documentos, dinero, tarjetas de crédito e identificaciones. Todas falsas.

Dejandode lado los archivos que revisaría en unos minutos, me di el lujo de pasearmepor la sala memorizando cada rincón de este, hasta que escuché un ruido provenientede lo que supuse era la cocina.

Por precaución, saqué el arma de mi bolso, le quité el seguro y la empuñe, dirigiéndome a paso seguro al lugar.

Al entrar vi a un hombre alto vestido de traje estaba agachado husmeando dentro del refrigerador.

- ¿Quiéneres? – dije sin dejar de apuntarle con el arma.

- Hola - dijo aun dándome la espalda, en cuanto volteó alzó ambas manos. – Oye, tranquila, soy yo.