Ellos fueron objetos sexuales toda su vida, solo conocían de abusos y maltratos. Comprados por un desconocido, esperando la peor de las vidas. Ella solo quería compañía. Tal vez no fue la mejor manera, pero tenerlos evitaba que colapsara. Y se iba a aferrar a esa vida, compartiendo casa con los chicos que habia comprado en una subasta de personas.