Corazón descalzo® [#1] (YA EN FISICO)

CAPÍTULO 27:LA PROPUESTA INDECENTE

29 de agosto de 2015
Complejo abandonado.
14:10 p.m.

Llamo a la puerta del despacho de Sergio antes de abrir, Catalina, Dane, Z y él clavan sus miradas en mí, odio cuando me miran con lástima. Suspiro cansada, mis ojeras me delatan y aunque las palabras de Sergio el otro día antes de dejarme ir fueron claras "vuelve cuando estés lista, nos apañaremos como sea" . No soy capaz de quedarme en casa con Zeus más de dos días, necesito mantener mi mente ocupada.

—No voy a irme a casa.—digo antes de que Sergio abra la boca.

—Amiga, creo que...—dice Catalina y yo niego.

—Si me necesitáis ya sabéis donde estoy.—salgo del despacho y voy directa a la enfermería.

Reviso los informes de los hombres que hay sobre mi mesa, gracias a dios las curas y demás técnicas necesarias han sido realizadas por Vicky e Iñaki. Hago una pequeña ronda antes de continuar poniéndome al día con todo lo que tengo pendiente. Iñaki entra en la enfermería y sin decir nada viene donde mí y me abraza, le agradezco con la mirada que no me pregunte nada.

—He pensado que me puedes ayudar a estudiar o enseñarme a sacar sangre o algo, no sé pero no tenemos casi trabajo por ahora y así te mantienes distraída.—sonríe tierno.

Asiento.

27 de agosto de 2015
Complejo abandonado.
17:55 p.m.

Iñaki se ha tenido que ir a entrenar junto al resto de hombres por lo que estoy sola, Catalina entra en la sala con su bolso. La verdad es que hay muy poco trabajo hoy y estoy jugando a un juego en el móvil para matar el tiempo.

—Coge tu bolso, nos vamos.—sonríe.

—¿A dónde?—alzo una ceja.

—Necesito un vestido para una cena importante y la opinión de mi marido nunca es objetiva porque todo le gusta.

No puedo evitar reírme, me levanto de la silla y cojo mi bolso.

—¿Y Sergio?—pregunto aunque me imagino que sabe de nuestra salida.

—Ya está informado de nuestra salida, pero tenemos que pasar primero por su despacho, quiere hablar contigo.

—De acuerdo, vamos entonces.

Salimos de la enfermería y nos dirigimos al despacho de mi jefe, Catalina se queda fuera cuando entro. Me hace un gesto para que me siente, está hablando por teléfono, aprovecho para mirar mi móvil donde leo un mensaje de Kevin proponiendo una cena mañana en mi casa con Almudena y Mikel, no es lo que más me apetezca en este momento pero sé que mi abuela quería que continuase con mi vida lo más rápido posible, por lo que acepto la petición de mi mejor amigo. Dejo el móvil y jugueteo con el colgante que me regalo Vicky hace unos meses quedandome absorta en mis pensamientos.

—Mirella.—la voz de Sergio llamándome me devuelve a la realidad.

—Si, perdón, estaba pensando en mis cosas...—me disculpo.

—¿Tienes planes esta noche?

Niego.

—De acuerdo, nos acompañaras a Dane, Catalina y a mi en un evento.—me informa—. Está bien que conozcas todas las facetas de este mundo, no solo la parte en la que mis hombres van en busca de tus cuidados a la enfermería.

—Sergio, no te lo tomes como...

—Es una orden.—pronuncia antes de que pueda negarme.

Suspiro y asiento, me levanto de la silla y su teléfono comienza a sonar de nuevo justo cuando me voy a despedir de él por lo que le hago un gesto con la mano antes de salir del despacho.