ANTIPODES | Riven [Fate: The Winx Saga]

Capítulo 2

El despacho de la directora es como poco peculiar. Estoy hipnotizada con una bola del mundo, de el otro mundo. Las zonas que simbolizan el mar se mueven realmente, mientras que los nombres de los diferentes reinos emiten una luz dorada cuando los tocas. Es sencillamente hermosa. Además las paredes de la sala están forradas con estanterías repletas de libros, es como un paraíso, el paraíso de un lector.

- Pensad en Alfea como vuestro nuevo hogar.- Nos aconseja Dowling.- Debe ser abrumador un mundo totalmente nuevo...

- Y aún así he visto al menos tres personas actualizando sus stories.- Apunta mi hermana mientras ríe.- Esperaba encontrar una escuela llena de campanillas revoloteando.

- ¿Enserio campanillas? Yo me esperaba más hadas del estilo de Maléfica... Al menos eso explicaría porque no hemos visto ni un solo par de alas.- Divago yo.

- No me puedo creer que tu gran explicación para la falta de alas sea que se las han cortado a todas, Ayla, me decepcionas.- Se burla Bloom, ¡Incluso levanta una ceja!¿Me está retando a rebatirlo? Parece mentira que no me conozca...

- Bueno lo que dices tiene un punto, pero si se las hubieran cortado en un pasado y poco a poco hubieran ido naciendo más sin ellas por el proceso de evolución...- No admitiré en voz alta que tiene razón, la explicación es absurda pero no es como si algo en toda esta situación tuviera sentido.

- Nadie nos corto las alas en masa, las llevábamos en el pasado pero sí que es cierto que la magia de transformación de ha ido perdiendo a la vez que evolucionamos.- Nos explica la directora.- Además, para vuestra información, campanilla era hada de aire y Maléfica hada de tierra, elementos que ninguna de vosotras posee. Bloom tú eres hada de fuego y Ayla tú eres...

- Hada de hielo, créame, lo sé.- La interrumpo, mi magia no ha sido precisamente discreta a la hora de revelarse. Aunque en honor a la verdad no fue tan malo como lo de Bloom.

- ¿Y cuando empezamos?- Bloom se sienta enfrente de Dowling para hacer la gran pregunta, empieza la hora de hablar de lo realmente importante supongo. Cojo asiente a su lado, no creo que sea necesario decir que yo también quiero saber la respuesta.

- Las clases comienzan mañana. Aprenderéis a usar vuestra magia despacio y con seguridad.

- Por curiosidad, ¿Como de despacio estamos hablando?- Me atrevo a preguntar, aunque me temo que no va a gustarme la respuesta.

- Lo que sea necesario y hablo enserio, la magia puede ser peligrosa, como vosotras bien sabéis. Nuestro horario está diseñado en función de eso, confía en el proceso.

- Un proceso lento...- Recrimina la pelirroja.

- Los graduados de Alfea han liderado ejércitos y gobernado reinos, han forjado poderosas reliquias y encontrado magia mucho tiempo perdida, dan forma al otro mundo.- Dice  Dowling como si fuera obvio.- Así que si conseguís triunfar aquí, también lo haréis vosotras.

- Oiga este discurso motivador está genial, no se ofenda, y no tengo duda del prestigio de esta escuela. Pero yo no quiero ser una líder mundial ni nada que se le parezca, solo quiero volver a California sin tener que preocuparme por matar a todo mi instituto de hipotermia.- La magia suena increíble pero no me servirá de nada en mi mundo, estudiar aquí es perder oportunidades de tener un buen futuro en casa.

- Si, este otro mundo... Alfea. Es increíble, pero no es nuestro hogar.- Me apoya mi hermana.- Solo hemos venido porque nos prometió que aprenderíamos control.

- Ahí estáis ambas equivocadas.- De repente se ha puesto sería, creo a la directora no le sienta bien que alguien rechace su preciada escuela.- Habéis venido porque sabéis que no tenéis otra opción.- Dice dando por finalizada la conversación.

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Si existen las hadas, ¿Existirán las brujas? Tienen que existir, es imposible que tenga tan mala suerte sin que nadie imponga su voluntad para que mi vida sea desgraciada. Eso o que la señora Dowling me odia con todo su alma y su ser. Esperaba compartir habitación con Bloom, es lo lógico, hermanas, nuevas, de un mundo diferente... Sin embargo alguien ha decidido que será bueno para mí compartir un espacio reducido con ricitos de oro. Definitivamente una de las dos matará a la otra antes de final de curso.

Hay otras cuatro chicas sin contar a mi hermana compartiendo el espacio ¿Tenían que ponerme con ella? No hace falta ser un lince para ver qué no tenemos absolutamente nada en común. Mirala está buscando modelito nuevo para la fiesta de esta noche, fiesta que por lo que todo el mundo dice es informal.

- ¿Tengo algo en la cara o simplemente te pongo?- Pregunta ella mientras se retoca el maquillaje frente a un espejo de cuerpo entero.- No paras de mirarme.

- No, solo me preguntaba si tanto maquillaje es para tapar la cara de asco que te sale de forma natural cada vez que ves a alguien que no besa el suelo por el que pisas.- Le respondo con una sonrisa de no haber roto un plato en mi vida.

- La gente espera que me importe mi aspecto, aunque no espero que precisamente tú lo entiendas.- Dice mirándome de arriba a abajo. Bueno si preocuparme por mi aspecto implica pasarme una hora diaria delante del espejo, no gracias, me gusta como soy al natural.

- Perdone usted princesa, no todas podemos ser tan perfectas como usted.- Digo haciendo gala de todo mi sarcasmo.

- No uses mi título para insultarme, además ¿Quien te lo ha dicho?- Creo que mi mandíbula acaba de caer hasta el suelo, ¿Acaba de decir que en una princesa?

- No me jodas, es imposible que seas un estereotipo tan anticuado y perfectamente medido.- La chica rueda los ojos y bufa antes de volver a prestar toda su atención a su propio reflejo.

Para ser nuestra primera conversación no ha ido tan mal, lo esperaba peor. Salgo de la habitación que comparto con el demonio de las lentejuelas y entro directamente a la habitación de Bloom. Esta hablando con una chica de tez negra, su pelo es una pasada una composición de trenzas adornan su cabeza, algunas se vuelven azules llegando a las puntas.

- A ver si adivino... ¿Ravenclaw? - Dice la chica desconocida.

- Si, a veces Slytherin ya sabes...- Contesta mi hermana con una sonrisa.

- Por eso las mentiras.- ¿Qué me he perdido?

- Tu gryffindor.- Dice Bloom.

-¿Como lo sabes?- Intenta averiguar la morena.

- Porque juzgas demasiado.- Respondemos mi hermana y yo a la vez.

- Vaya y lo dice la espía, tu definitivamente, eres Slytherin.- Me dice la de trenzas con una sonrisa amistosa.

Sonrio orgullosa y digo.- Y a mucha honra.

- Soy Aisha.- Se presenta.- Supongo que eres la hermana de Bloom.

- Supones bien aunque prefiero que me llamen Ayla.