Let's Just Call It Love

Capitulo 2

Esta profundamente dormido cuando escucha el sonido de alguien llamando a la puerta con los nudillos. Segundos después escucha una voz de una chico. Le cuesta diferenciar lo que esta diciendo en medio de la neblina de sueño. Abre los ojos poco a poco e intenta enfocar la mirada. No sabe donde esta, solo sabe que tiene una resaca épica. Poco a poco va recuperando la memoria. Primero la ruptura con Kao. Después la llamada de Mild ofreciéndole pasar la noche en su piso. Y, por ultimo, su visita al apartamento de Mew.

Tras eso, todo esta oscuro, vacío.

Parpadea, se incorpora sobre el colchón y el edredón resbala por su cuerpo. Su torso desnudo llaman enseguida su atención, fija la mirada a la persona que tiene a un lado, que es Mew y esta durmiendo desnudo tumbado boca arriba y su miembro semierecto lo saluda sin ningún tipo de pudor.

Poco a poco, empieza a recuperar los recuerdos de lo sucedido ayer tras la primera copa de whisky. Recuerda que después de la primera copa vino la segunda, y después la tercera. A la cuarta le pareció buena idea beber el whisky de la boca de Mew. A la quinta le invito a que se lo bebiera de su ombligo. Y a la sexta acabaron follando como perros en celo en su cama. No una, si no cuatro veces más.

—¡No puede ser!— exclama en un grito cuando recuerda lo que hizo a lo largo de la noche.

A su lado, Mew se remueve. Aunque lo que llama su atención es la mirada ceñuda de un chico que acaba de acercarse a él con un manojo de billetes en la mano. Los mira sin llegar a tomarlos porque no entiende nada de lo que esta pasando. Debe ser el chico que ha llamado a la puerta y que lo ha despertado.

—Vamos, chico, será mejor que regreses a tu casa. Con esto seguro que te puedes pagar un taxi— tira los billetes sobre la cama y se cruza de brazos. Es joven, seguro que ni siquiera ha cumplido la mayoría de edad.

—¿Quién eres tú?— pregunta Gulf. Sigue desconcertado

—El hermano de este idiota— señala a Mew con el dedo índice —Suelo deshacerme de las fulanas o fulanos con los que se acuesta.

Se queda en silencio unos segundo por que lo ha dejado sin palabras. ¿En serio Mew usa a su hermano para deshacerse de las chicas con las que se acuesta a la mañana siguiente?

—Perdona, pero no soy ningún fulano...

—Ya, eso dicen todos

—Eh, Supanut, ¡Lárgate! —Mew parece despertar de su letargo. Se ha sentado sobre el colchón y se tapa sus partes con el edredón.

—¿Por qué? Si te estoy haciendo un favor. 

Esa situación es una de las mas surrealistas que ha vivido nunca. Toda en sí. Que se haya acostado con Mew, que su hermano lo eche de su casa. Que le ofrezca dinero como si fuera una prostituta

—Por el amor de Dios, Supanut, ¡Vete de aquí!— ordena Mew claramente molesto.

—Pero...

—Espérame en el salón, maldición.

Supanut se da la vuelta indignado, le echa una ultima mirada por encima del hombro a Gulf y cierra la puerta de un portazo tras de sí.

—Este niño no sabe lo que es intimidad. Lo siento, gatito

Gulf inspira hondo y deja ir todo el aire que guardo en los pulmones antes de gritar

—¡No me llames gatito! pero, ¿se puede saber que me has hecho esta noche?¿Me has emborrachado para aprovecharte de mí?

—Ehhh ... Detente, que yo estaba más borracho que tú. Y que yo recuerde, fuiste tú el que empezó.