Capitulo 8

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A las 7 de la tarde han quedado con Mild y Lhong para cenar. Hai también va. Mew y él se encargan de llevar un buen vino y un postre. Durante el camino siente la mirada directa de Mew sobre él. Lleva mirándolo así desde la vez que hablaron.

Llaman el timbre y Mild abre. Enseguida ve en su rostro una expresión de apuro que lo pone alerta. Cuando llegan al salón entiende lo que pasa, se encuentran con Hai acompañado de una chica muy guapa y elegante. Es Ana su futura esposa. No están comprometidos aún pero Hai sabe que es su destino dentro de algunos años. Es la primera vez que Hai la lleva alguna de sus reuniones. Y si Mild tiene esa cara es por que Ana no le cae bien. Bueno, Ana no le cae bien a nadie. Mew no la soporta.

—Voy a sacar algo para picar —Dice Mild dirigiéndose a la cocina y Gulf va tras él

—¿Qué hace ella aquí?

—Se ve que se ha puesto tan pesado que quería acompañarlo esta noche que no le ha quedado otra opción que traérsela —Dice con cara de fastidio —Como si no tuviéramos suficiente con aguantarla en los eventos públicos

—Bueno, supongo que ya va bien que nos acostumbremos a ella, por que Hai la traerá siempre cuando se casen

Mild hace una mueca disgustado.

Poco después sirven los nachos y cacahuates bajo la atenta mirada de Ana que arruga la nariz con desdén.

—Oye ¿Tus redes sociales no son sobre moda? —Ana le pregunta a Gulf entrecerrando los ojos como si lo evaluará.

Siente como sus brazos comienzan a picarle, pero evita la tentación de rascarse

—Si tengo, aunque son un poco modestos

—Ya... —se lleva su café a los labios y da un pequeño sorbo —Te admiro la verdad

—¿Me admiras? —pregunta Gulf sorprendido

—Si, es decir, mírate. No cumples nada con el físico típico del mundo de la moda y en vez de avergonzarte, públicas fotos tuyas sin pudor ninguno, sin pensar en las críticas que vas a recibir por ser... bueno, ya sabes, distinto a lo que se espera. Yo la verdad la pasaría fatal siendo tu. Eso es de admirar

Gulf deja el dulce que iba a meterse en la boca sobre la mesa y la mira en estado de shock. Es la primera vez desde que abrió sus redes sociales que alguien le dice algo así. Durante unos segundos se siente humillado. Siente como las lágrimas le pican los ojos a causa de la ira que en esos momentos invade su cuerpo.

Nota como Mild esta a punto de hablar pero antes de que lo haga Mew se adelanta.

—Gulf no tiene que avergonzarse de nada, Ana. Al contrario. Eso lo honra. El mundo de la moda hace demasiado tiempo que está secuestrado por idiotas sin cerebro que venden cuerpos idealizados e imposibles. Las redes de moda deben servir para contrarrestar esa mierda. Para mostrar cuerpos reales e imperfectos con lo que otros puedan sentirse identificados sin pensar que algo en ellos está mal.

El discurso que hace Mew lo deja anonadado. Y yo no sólo a él. Mild lo mira con los ojos muy abiertos, Lhong con él ceño fruncido y Hai con una sonrisa un poco extraña y Ana como si acabarán de meterle un palo por el culo.

Mew se levanta refunfuñado y Gulf va tras él. Lo encuentra justo a tiempo antes de que entre al baño. Gulf coloca los brazos sobre el cuello de Mew y lo empuja hacia adentro y cierra la puerta con el pie. Antes de que pueda decir nada, estampa sus labios contra los suyos y trastabillan por la estancia hasta acabar chocando con una pared sin despegar sus labios. Abre la boca y deja que su lengua y la del mayor se enrede. Gulf suelta un jadeo cuando, acompañado del beso, las manos de Mew bajan hasta su trasero y lo aprieta contra él con un movimiento de caderas. Gulf puede sentir su erección por encima de la ropa, entre sus muslos.

Let's Just Call It LoveWhere stories live. Discover now