𝑰 𝑳𝒐𝒔𝒕 𝒀𝒐𝒖 𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐

𝑬𝒊𝒈𝒉𝒕

Elizabeth despertó sudando. Sintiendo los latidos del corazón mientras temblaba.

__Está bién, está bién, fue una pesadilla,solo está en tu mente__repitió una y otra vez tratando de calmarse, hundiéndose bajo las pesadas sabanas rojas. Casi intentando esconderse de algo que sólo estaba en su cabeza, queriendo controlar su respiración y parar de temblar.
Cuando el miedo al fin se desvaneció, eran alrededor de las 3:30 am; suspiró sentandose.

La luna alumbraba la habitación, reflejando en los detalles dorados del dosel, volviendo todo el ambiente asfixiantemente abrumador; tanto, que lo primero que hizo fue tomar una campera y salir en busca de aire fresco.

Estaba sola en las frías penumbras del pasillo. Caminando sin ningún destino en mente, terminando por alguna razón en la torre de astronomía, frente a una silueta muy familiar, quién al notar su presencia se giró a verla.

__Yo... no sabía que estabas aquí, no quise interrumpir __ se disculpó la joven dispuesta a marcharse.

__ ¿Qué haces despierta a está hora?__ índago él.

Ella arqueo una ceja __ podría preguntar lo mismo.

__ Insomnio __ contestó el rubio sin titubear.

Elizabeth guardó sus manos en los bolsillos__ pesadillas.

__ ¿Quierés acompañarme?__ la invitó Draco mientras apuntaba con su cabeza al barandal de la torre.

__ ¿Quierés que te acompañe?__ cuestionó intrigada de su respuesta. Él no respondió, en su lugar levantó sus hombros a la vez que se dirigía al mirador.

Algo en Elizabeth le repetía a gritos que se marchara. Él era Malfoy, cualquier situación que lo incluyera no podía terminar bien, pero ¿qué iba a hacer en su sala común?, no estaba dispuesta a dormir nuevamente y todo el castillo se sentía tan asfixiante para ella, se rehusaba a regresar.

Elizabeth se paró a su lado__ ¿vienes seguido?...__ susurró admirando la vista.

__ De vez en cuando, es un buen lugar para pensar y tiene una excelente vista__ confesó él mirando el cielo.

__ Sí,es vedad__ admitió la joven.

__ ¿Son frecuentes?...__ preguntó Draco luego de varios segundos de silencio__ las pesadillas...__ aclaró.

__ Depende...hay semanas en las que no puedo dormir y luego se van por un tiempo, pero regresan, siempre lo hacen __ confesó Elizabeth.

__ Te acostumbras...__ susurró el joven mirándola a los ojos__  el miedo no pasa, pero se vuelve algo... cotidiano__ afirmó.

__ Sí...supongo que tienes razón...

Se quedaron en silencio,contemplando el reflejo de la luna en el agua.

El resto de la semana fue igual. Convirtiendose en una extraña rutina.
Elizabeth despertaba en la madrugada, tomaba una campera y caminaba hasta la torre para encontrarlo. A veces de traje, otras en pijama, pero sin importar cómo, él siempre estaba allí, parado, esperando.
Hablaron sobre las pesadillas, sobre su día e incluso a veces decían una que otra broma.

Se sentía bien,cómo si el tiempo no hubiera pasado,cómo si los insultos y el rencor se desvanecieran en lo alto de aquélla torre, dejando solo dos personas que anhelaban la compañía del otro en la solitaria noche.
Arrastrando todo el dolor y el odio. Permaneciendo pequeñas sonrisas, breves miradas y la esperanza de que tal vez las cosas mejoraran.

Para Elizabeth se volvió adictiva la necesidad de subir esas escaleras y encontrarlo,dispuesto a mostrarle una parte de él que creía perdida, una parte que no habia visto hacia ya años.

Draco Malfoy se había vuelto un misterio con el pasar de los años y ella deseaba descubrirlo.

Quizás fue fácil acordar esa frágil paz entre ambos porque en alguna otra vida se habían tenido cariño. Sin embargo, aún estában rotos, con tantas grietas entre ellos que no se irían en una noche, pero al menos era un inicio.

Un inicio de algo, aunque ninguno de los dos tenía claro de qué exactamente.