Kirschtein {Jean x reader}

15.

Los días pasaban terriblemente lento, Erwin a penas me dejaba moverme de la cama y Reiner no había vuelto a verme desde que se puso celoso de Jean. Me sentía sola, la verdad, Levi solía hacerme compañía algunas noches y esta no era diferente, Levi estaba sentado a mi lado tomando té de manera tranquila mientras ojeaba unos informes. 

Levi: ¿Te encuentras bien __? Te noto distraída. 

Esbocé una leve sonrisa, desde que le revelé que realmente Erwin era mi hermano mayor, había dejado de llamarme mocosa y se preocupaba más por mí, respecto a su relación con Erwin. Todo marchaba sobre ruedas, la mirada de Levi se iluminaba cada vez que compartía palabras con mi hermano.

__: Estaba pensando lo aburrido que es esto. 

Suspiré cansada y Levi me ofreció una taza de su famoso té negro, tomé la taza con suavidad y le di un pequeño sorbo. 

__: Está delicioso. 

Levi: Entonces... ¿Qué se supone que te ocurre?

__: Discutí con mi pareja... A penas puedo levantarme de la cama... No veo a mis amigos desde la misión... Esto es aburrido capitán...

Levi: Lo sé __, pero tu hermano me pidió que no salieras de aquí. 

Le di otro trago al té, olía a regaliz negra, me agradaba. 

__: ¿Ni siquiera puedo ir a ver a Jean?

Levi: ¿Al cadete sancionado?

Asentí con la cabeza despacio, no entendía por que me dejaron ir nada más despertar a verle. Levi suspiró cansado frotándose los ojos, apartó la taza de té dejándola sobre la mesa junto con su libro. 

__: ¿Dónde vas? 

Levi: ¿No querías ver a Kirchtein?

__: S-Sí, claro que quiero ¿Pero que vas a hacer? 

Levi: Espera aquí. 

Asentí de nuevo y observé como Levi salía del cuarto. Me dediqué a mirar a mi alrededor, ya no quedaba nadie en la enfermería, todos los heridos ya la habían abandonado, pero por alguna razón yo no parecía mejorar rápido. El estrés era el causante de todos mis males, o eso decía Hanji. 

Miré mis manos, las cicatrices de la batalla en Rose ya había cerrado bien y sin ninguna infección, eso era extraño. Pensé en qué se supone que estaría haciendo Reiner, no quería pensar que me había abandonado o algo por el estilo.

Me froté las sienes cansada justo en el momento en el que las puertas se abrieron. 

Levi: Pasa niñato. 

Levi empujó a Jean dentro de la sala, Jean estaba desorientado, lo notaba en su mirada y en sus torpes movimientos. 

Levi: Tenéis hasta el amanecer, ni un solo minuto más. No me apetece discutir con el comandante. 

Levi cerró de portazo. Jean y yo nos miramos en silencio, un silencio agradable. Jean se acercó a mi despacio y se sentó en el borde de la cama. 

Jean: ¿Cómo te encuentras? 

Me acarició la mejilla con suavidad, era demasiado tierno cuando se preocupaba por mi. 

__:  No me dejan moverme de aquí, así que supongo que mal. 

Soltó una suave carcajada y me besó suavemente acariciando mis mejillas. 

Jean: Me alegra que estés aquí...Al menos estas segura. 

Me abrazó por la cintura y colocó mi cabeza sobre su pecho, realmente estaba a gusto.

__: ¿Cómo están los demás?