Kirschtein {Jean x reader}

5.

Mentiría si dijese que los entrenamientos eran lo mejor del mundo.

Shadis nos hizo levantarnos a las tres de la mañana y yo tan solo había logrado dormir unos veinte minutos.

Shadis: Venga mierdas, todos vestidos en dos minutos.

Golpeó la puerta de la cabaña y se retiró del lugar. Todas obedecimos.

Mikasa: Espero que no me vuelvas a despertar... Estaba teniendo un sueño cojonudo.

Solté una leve carcajada y me puse la chaqueta que nos indicaba como aspirantes a soldados y salí de la cabaña mirando a mi alrededor. Reiner estaba apoyado en la puerta de su cabaña, a penas unos metros separada de la mía.

Reiner: Vaya cara de muerto llevas.

Me revolvió el pelo con suavidad mientras que yo bostezaba cansada.

Reiner: Me da que Jean te dio muy duro a noche.

Arquee una ceja. Quizás en otras circunstancias le hubiera pegado, pero eran las tres de la mañana y había dormido tan solo veinte minutos.

Reiner: ¿Por qué me miras así?

__: Eres un idiota Reiner... No estuve con él anoche.

Jean salía de la cabaña en ese momento. Nuestras miradas se cruzaron y durante unos segundos que me parecieron eternos, solo estábamos él y yo. Asentí con la cabeza de manera educada y Jean se limitó a mirar a otro lado.

Reiner puso su brazo sobre mis hombros.

Reiner: Entiendo... No os lleváis bien.

__: Él tiene la culpa.

No volví a mediar palabra el resto del día. Los entrenamientos eran duros, correr, saltar, huir, pelear. Por no hablar de la prueba que nos habían hecho aquella mañana. Teníamos que aguantar el equilibro sobre el cinturón del equipo 3D y quien no lo consiguiera sería enviado a casa.

Yo lo logré... Por los pelos, mi cinturón estaba defectuoso y por poco se rompe cuando me alzaron. Sin embargo logré pasar la prueba.

Ahora estábamos corriendo por el bosque, separados por equipos. Era una especie rara y peligrosa de atrapa la bandera, mi equipo estaba formado por Eren, Reiner, Ymir y Marco. Nos habíamos dispersado sobre nuestra zona mientras que Marco y yo nos manteníamos en silencio, espalda con espalda.

Habíamos acordado que yo misma llevaría la bandera y ahí la llevaba, atada a la muñeca.

Marco: Oye __...

No me moví pero le escuchaba atentamente, sentía que las palabras le pesaban.

Marco: ¿Puedo contarte algo?

Asentí suavemente con la cabeza mientras vigilaba a mi alrededor puñal en mano.

Marco: Jean habla mucho de ti... Casi podría decir que le gustas... Sin embargo lo único que tengo claro es que esta celoso de Reiner.

Me quede completamente en silencio y un leve nudo se formó en mi garganta.

__: Marco.

Marco se giró hacia mi.

Marco: ¿Que ocurre?

Supure y apreté el nudo que sostenía la bandera de nuestro equipo.

__: Cúbreme, tengo que buscar a Jean.

Marco me paso un silbato que teníamos que usar en caso de emergencia y yo comencé a correr hacia la nada, las ramas repentinas herían mi rostro y sentía como cada vez las piernas me iban flaqueando. Las leves gotas de lluvia empapaban mi rostro y mi ropa. Me había perdido.