parte 3

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Aquella tarde fue la mejor que ellos havian vivido. Sintieron que estaban junto a quien el destino les tenia preparado para estar juntos.

- Ritsuka, estemos siempre juntos- le dice acurrucandose un poco mas en su desnudo pecho- jamas me dejes solo.

- Usagi, tranquilo, nada nos separará... Nada.

Usagi se apolló en su braso y miró los ojos de Ritsuka, tomó su barbilla  y le dio un tieno beso, a lo que Ritsuka respondio abrasandolo de la sintura. Estaban muy cansados para otra ronda, pero sus corazones lo pedian a gritos, por lo que decidieron seguir.

-Ritsuka! ven aca un momento!

- Mierda, mi madre...!

Ritsuka se apresura en bestirse, se hechó perfume, y corrió por las escaleras hasta llegar donde su madre, quien sostenia a su padrastro de la mano. Eso a Ritsuka le desagradaba, pero que se le iba a hacer, no?. Al lado de ellos, sobre la repisa de aquella lujosa cocina estilo americana, havia una caja, con agujeros. No se escuchaban signos de vida dentro, por lo que decio preguntar.

- Madre, que es... eso?

- Velo tu mismo, espero te guste

Ritsuka se apresuró a abrir la caja, se dio cuenta de que tenia un lazito con una tarjeta: 

              "Espero sea de tu agrado. Te lo mereces por cuidar a tu madre, espero no estes mal por compartirla."

Ritsuka quitó el lazo con cuidado y abrio la caja. Un cachorro durmiendo. Un precioso Siberiano 100% negro. El cachorro abrió sus ojitos y miró a Ritzuka. Ojos azules. El pequeño se paró torpemente y comenzó a moverle la cola a Ritsuka.

- Que es esto?, Una broma?

- Ritsuka, intento empatizar un poco, no sabia como, asi que te di lo que atodo niño le gustaria tener. Un cachorrito.- le dijo su padrastro con una sonrisa algo desconfiada

- No soy un niño.

Y dicho esto Ritsuka dio media vuelta y se aproximó a las escaleras. Pero de todos modos... Un perro asi no esta nada mal... Por lo que se devolvio, tomó al cachorro y subió a su havitación. Usagi seguia en su cama, solo que parecia estar dormido, y destapado hasta la cintura. Ritsuka lo tapó hasta el  cuello, y se hacercó cuidadosamente a su angelical rostro, le dio una pequeña caricia con su pulgar y lo besó en la mejilla. Usagi hizo un tierno jesto con la boca y siguio en sus sueños. Ritsuka dejó al cachorro en el suelo, este comenzó a oler todo el cuarto.

- Como te pondré...?- miró su negro pelaje, un cachorro como aquel algun dia seria un gran perro, por lo que nombres como 'copito' u 'orejon' no eran una buena opción. Tampoco un nombre común como 'rex'... Él queria algo especial- Kai. Me gusta kai.- en eso Kai lo miró y movio su colita- te gusta a ti tambien?- Kai comenzó a dar pequeños saltitos mientras corria hacia él, por lo que Ritsuka lo tomó y lo dejó en la cama, Kai se acomodó y comenzó a dormir.- Dios. que rapido.!

El resto del día fue normal, Usagi cuando despertó comenzó a hablar con Ritsuka de su vida. Comenzaron a conocerse bien, al fin y al cabo, intimar seria el ultimo paso dentro de las parejas normales, pero ellos se saltaron todos los pasos y empezaron por el ultimo. Linda pereja.

...

hermanastros... y algo masWhere stories live. Discover now