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Paso 5: Exclusividad.

En este punto del plan, tus intenciones ya son claras por lo que es momento de la exclusividad. Sí bien, aún no son pareja, puedes sugerir alguna actividad que solo la realicen juntos. Los momentos que tengan en privado los ayudaran a saber sí realmente quieren estar el uno con el otro.

Debido a su velocidad al trotar el camino al Shiratorizawa le resultaba corto pero ese día lo sintió aún más, por lo que no pudo llegar a una respuesta.

La noche anterior su alocado amigo le había sugerido un sin fin de actividades para que las hicieran en exclusividad pero ninguna le había convencido; le había tachado de cerrado pero no le parecía atractiva la imagen mental de ellos dos robando dulces de la maquina expendedora o cazando libélulas.

-Wakatoshi-kun eres tan complicado ¡Ya sé! Besense en la bodega del gimnasio, nadie los verá ni los molestará, exclusivo y privado-soltó una estruendosa carcajada ante su idea pero la interrumpió cuando vio al castaño meditarla-oye Wakatoshi-kun ¿lo estas considerando?.

Solo dos días antes se había imaginado el pequeño cuerpo (a comparación con el suyo) del colocador entre sus gruesos brazos; aquello le había hecho sentir algo que nunca había experimentado, una emoción tan grande que casi no podía retenerla dentro de su cuerpo, lo único que pudo hacer ante ella fue girase frente a la pared y clavar su rostro en la almohada.

Pero...él y Shirabu besándose...lo imaginó y le gustó.

-Eso será después, aún no es el momento.

El fuerte avellana y el cálido e intenso miel. A distancia y con deseo de fundirse en el contrario.

Entendía a la perfección la diferencia entre gustar y amar. A él le gustaba Shirabu pero descubrió que amaba sus dominantes ojos conectados a los suyos.

-Ushijima-san ¿sabe cuando empezaremos a revisar las estrategias?

-No-su vista se mantenía en sus compañeros que se encontraban en la cancha pero su cuerpo sentía la presencia del castaño; el cosquilleo en su estómago por poco lograba hacerlo perder la calma.

-Deberíamos hacerlo lo antes posible para estar mejor preparados-su tono era serio y bajo. Encantador y seductor a sus oídos.

-Estamos preparados.

-Si, lo estamos.

-Vamos Shirabu.

Se unieron a los demás para iniciar el entrenamiento. Muchas fuerzas juntas, eso es lo que eran.

Rebotó el balón dos veces para después hacer un saque, golpeó la red y por poco alcanzó a pasar; su brazo se sacudió y su mano se contrajo en puño, sus ojos brillaron con molestia y determinación por mejorar.

"Ah...eso"

Lo supo. A los dos les gustaba el volleyball y les gustaba jugar juntos. Sí bien entrenaban en equipo, se cruzó por su mente la idea de entrar juntos después de cada entrenamiento grupal; era una actividad que ambos disfrutaban, lo harían en privado y les ayudaría como colocador-rematador. La actividad perfecta.

-Andando Wakatoshi-kun es hora de irnos.

-Esperaré a Shirabu.

-¿Eh?

-Lo esperaré para hablar con él.

Se río fuerte. Era alucinante todo lo que comenzaba a hacer el capitán únicamente por su amargado menor.

Yo sé de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora