Prólogo.
Izuku y sus compañeros estan ya en segundo año domina el 50% del One For All, él no había hablado demasiado con la pelivioleta, pero después de saber el mismo gusto músical empezaron a pasar más tiempo de caridad, sus compañeros se dan cuen...
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Midoriya Izuku, nuestro peliverde favorito se encontra caminando tranquilamente por el campus de U.A, a eso a lo lejos puede divisar una pequeña niña de cabello blanco, una sonrisa se forma en su rostro y corre hacia la pequeña niña. Se agacha un la abraza con amor.
-Eri-chan- la abraza con amor.
-Otoo-san- lo abraza fuerte del cuello.
La niña se aleja y lo ve con alegría.
-Que tal tus vacaciones? Como estuvo el viaje?- preguntó con alegría la niña.
-Todo fue bien, los chicos y yo vimos el mar, a la próxima hay que ir juntos-
-Okaa-san también?- le sonríe.
-Si ella también- acaricia su cabeza.
A unos metros atrás de la pequeña se acerca un pelinegro el cual los ve y esboza una leve sonrisa.
-Midoriya- habla este.
-Aizawa-sensei- se levanta y toma la mano de la niña.
-Despues de clases... Necesitamos hablar- su expresión era seria y eso preocupo un poco al peliverde.
Este asiente y carga a la niña para ir al salón de clases.
El día de hoy habían acordado dejar que la niña pudiera estar en clase y pasar el tiempo con Izuku.
Ella feliz había despertado temprano, y se apresuró a llegar a U.A.
Entraron al salón y todos se sorprendieron de ver a la pequeña alli.
Algunos se acercaron, Asui, Uraraka y Momo.
-Eri-chan- le hablo Momo y le sonrio.
-Yaomomo-oba-san- se apresura y la abraza -Mira- le dice y de una pequeña mochila saca al muñeca que le dio.
-Así que la has estado cuidando. Buena niña Eri-chan- la felicita.
-Así que por eso saliste más temprano de los dormitorios- una pelivioleta se acerca desde atrás al peliverde.
-Kyoka... Si Eri-chan pasara el día con nosotros-
La albina se da la vuelta y sus ojos se ponen como estrellas.
-Okaa-san- corre a todo lo que da y se tira a los brazos de la ojivioleta.
-Eri...- esta la abraza fuerte y le sonríe -extrañe verte sabes-
El pelinegro entro al salón y los ve.
-Todos a sus lugares-
Estos van a sus asientos y Eri se sienta junto a la pelivioleta, como casualidad había una silla disponible.
Las clases comenzaron y Eri preguntaba curiosa a la pelivioleta, mientras ella respondía con una sonrisa.
Esto era visto por el peliverde y le daba ternura ver eso, todos veían eso y nunca habían visto a la chica así de feliz.
