Prólogo.
Izuku y sus compañeros estan ya en segundo año domina el 50% del One For All, él no había hablado demasiado con la pelivioleta, pero después de saber el mismo gusto músical empezaron a pasar más tiempo de caridad, sus compañeros se dan cuen...
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Un peliverde estaba saliendo de su habitación ya con su uniforme, su mochila en hombro listo para bajar al comedor y prepar el desayuno para el y su novia.
Mientras bajaba los escalones, saludo a todos los que se encontraban en el lugar, ellos respondieron pero lo veían extraño, sus miradas eran de asombro e intriga.
Izuku no presto atención a eso, ya en la cocina reviso en los gabinetes para buscar ingredientes y especias.
Aunque no iba a preparar algo extravagante, unos simples panqueques con mermelada de fresa y jugo de naranja.
Escucho la dulce voz de su novia y saca el rostro desde la puerta para verla, ella le sonríe y va hacia donde está el.
-Izuku... No crees que los chicos están raros?- lo ve a los ojos.
-Cuando los salude me veían con unas miradas muy curiosas- la mira.
-Sabes el por qué de eso?-
-No lo sé... No tengo nada en el rostro verdad- se dice el mientras tocaba sus mejillas.
-No tienes nada- sonríe y ve los panqueques.
-Hay que desayunar... Falta poco para que comiencen las clases-
Sin mas ambos comienzan a comer, degustando la comida.
Kyoka saborea los panqueques y agradece por tener a tan buen cocinero como novio.
El peliverde ve tan hermosa a la pelivioleta que acaricia uno de sus conectores, ocasionando que ella se sonrojo y lo vea con timidez.
Izuku sonríe y le da un bocado.
Ella avergonzada lo acepta y sonríe.
Juntos caminan hacia su salón, al entrar pueden ver que casi la mayoría de sus compañeros se encontraban allí, todas las miradas se dirigen hacia ellos y eso los incomoda un tanto.
Sin más se van a sus asientos, pero un ruido de una silla alerta a todos y al ver quien es, no es nada más que el cenizo.
-Tu... Idiota... Es cierto- ve de reojo al peliverde.
El ojiesmeralda lo ve extrañado.
-Que cosa Kacchan?-
-No te hagas el idiota- se enoja y azota el pupitre del peliverde -Que tu y audífonos...-
Ahora ambos comprendían y se sonrojaron un poco.
-F-fue algo que ocurrió...- el cenizo lo interrumpe.
-No me importa escuchar los detalles idiota-
En ese momento entra Aizawa, el cenizo regresa a su lugar.
Y así dan comienzo las clases, como normal mente lo hace.
