¿Me aceptarías si yo... tuviera una hija? - Kookgi

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- menos del 50% de compatibilidad - bajó el papel, quedando en shook.

Yoongi también quedó sorprendido, aunque enseguida reaccionó abrazándolo.

- eso significa que...

- comparte mi sangre, pero no como familiar directo, oh mierda - sintió las lágrimas volver a salir - ji eun es una perra maldita! - abrazó a yoongi más fuerte, sollozando.

- shh tranquilo, al menos sabemos que si es algo tuyo, te mintió pero no del todo, lo que aún no me cuadra es que sea igual a ti.

- me acompañas a mi casa? Por favor - le miró a los ojos, se veía tan vulnerable.

- está bien, te acompañó - dio un pequeño beso en sus labios y se pasó al asiento del copiloto.

Jungkook se limpió las lágrimas para proceder a encender el auto y salir de ese lugar, para ir a su casa, tenía tiempo antes de ir por nayeon.

Conducía con cuidado, trataba de calmarse en el camino, hasta que llegaron y estacionó el auto adentro.

Ambos bajaron, jungkook abrió la puerta y se adentraron en la gran casa.

Yoongi sólo lo seguía, iban subiendo las escaleras, hasta entrar por una puerta, era la habitación del castaño.

Jungkook lo tomó entre sus brazos, para tirarse a la cama con el y, sin quererlo, comenzar a llorar de nuevo.

Yoongi acariciaba las hebras castañas, tratando de darle paz, dejando que se acurrucara en su pecho.

- sabes? A-acabo de recordar a-algo cuando ve-veníamos hasta aquí.

- y que es?

- yo, jamás tuve relaciones con ji eun, ella me dijo que había llegado ebrio a casa y que tuvimos sexo, pero esa fue una puta mentira - dijo un poco más calmado - esa noche yo no le hice nada, recuerdo que fuí a dormir a la habitación de invitados que tenía esa casa, a la semana salió embarazada, yo me preguntaba, cómo? Y ella me salió con esa mentira.

- entonces, como explicamos ese 50%? No tiene sentido - yoongi sentía que algo no cuadraba.

- creo que ya lo descubrí, fue algo que en ese tiempo ignoré - tomó un respiro - yo… tengo un hermano, el siempre ha sido coqueto con todo el mundo, yo ignoraba que el estaba demasiado cerca de ji eun ya que no me interesaba, pero olvidé ese detalle cuando me dijo la mentira, después de que ella dijera que estaba esperando a nayeon el desapareció, pero yo estaba demasiado ocupado recriminandome como para darme cuenta.

- eso significa que…

- en pocas palabras, nayeon no es mi hija, sino mi sobrina que por algunas cosas del destino sacó algunos de mis rasgos.

- oh Dios - dijo abrumado, abrazando más a jungkook, quien comenzó a tirar lágrimas de nuevo.

Llamenlo llorón si quieren, pero esto le está afectando mucho, demasiado, su angelito resultó ser su sobrina, era demasiado shockeante, no se imaginaba que habría pasado si no compartiera sangre con ella, seguramente se abría desmayado.

Lloró un buen rato en los brazos de yoongi, hasta que se quedó dormido con las caricias que este daba en su cabello.

Yoongi estaba apunto de dormirse también, pero recordó a nayeon, por lo que saltó en su lugar revisando la hora en su teléfono, 4:55 PM, mierda.

- jungkookie, despierta, tenemos que ir por nayeon, vamos, bebé - le susurró en el oído, pero no consiguió despertarlo.

Jungkook solo se acurrucó más contra él, dándole una imagen tierna, pero no era el momento.

- veamos, que hago? - tenía que pensar rápido - jungkook! Tu hija!

En ese momento el castaño abrió sus ojos en grande, levantándose de inmediato.

- jodida mierda! Que hora es!?

- 4:56 koo - se levantó igualmente.

- no, no, tengo que llegar! - tomó a yoongi de la mano, logrando que tropezara por lo rápido que empezó a correr.

Jungkook alcanzó a atraparlo, lo tomó entre sus brazos, bajando las escaleras corriendo hasta llegar al auto y ubicar a yoongi en el asiento del copiloto.

- tengo que llegar, se lo prometí - hablaba solo, cegado.

Estaba seguro que lee estaría ahí, tratando de llevarse a nayeon, tenía que impedirlo a costa de cualquier cosa.