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— Hyo~ por favor — Jungkook estaba agarrando a la pelirroja de la cintura, rogándole.

— Jungkook, no se si tenga un espacio en mi agenda — dijo ella apenada.

Jungkook procedió a hacer sus ojitos de cachorrito, aprendió esa costumbre de Nayeon cuando quería chantajearlo para que le comprara algo.

Y cómo era de esperarse Jihyo no pudo resistirse a esos brillantes ojitos.

— ¡Está bien! Haré lo que sea para poder estar en tu caso, pero deja de hacer esa cara — juntó sus manos en forma de súplica.

Jungkook sonrió en grande y se abalanzó hacia ella.

— ¡Muchas gracias Hyo! — se restregó en su cuello y Jihyo le devolvió el abrazo.

Jihyo era una compañera suya que trabajaba en el mismo bufete de abogados que él, una de las mejores y no confiaba en nadie más para que llevara que su caso que ella.

Sabía que Ji eun pagaría al mejor abogado, así que él tampoco quería quedarse atrás.

Y ya que no podía defenderse el mismo su compañera era la mejor opción.

— Nay, adivina — dijo Jungkook mientras que iba a dejar a Nayeon a la escuela

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— Nay, adivina — dijo Jungkook mientras que iba a dejar a Nayeon a la escuela.

— ¿Qué pasa papi?

— Tía Hyo va a ayudarme con el juicio — sonrió en grande.

— ¡¡Genial!! ¡Tía Hyo es increíble! — Nayeon celebró en su asiento.

Nayeon conocía a Jihyo de tantas veces que había ido a la oficina de Jungkook, la pelirroja siempre había sido muy linda con ella, dándole dulces y dibujos que ella pudiera colorear.

Era la primera mujer por la que no se sentía amenazada, quizá porque ella jamás había tenido interés en Jungkook, jamás la había visto detrás de él, jamás la había escuchado pronunciar su nombre de forma chillona, jamás la había visto restregar sus grandes senos en su cuerpo y muchas cosas más.

Además la había visto besar a una chica, así que supuso que quizá los hombres no le gustaban.

A pesar de tan solo tener 7 años Jungkook fue explicándole sobre las orientaciones sexuales mientras crecía, porque el sabía que se iba a encontrar con estas cosas en un futuro y quería que lo tomara de una forma normal, cosa que a Ji eun jamás le agradó.

Llegaron a la escuela y ambos bajaron del auto, Nayeon tomó la mano de Jungkook y ambos se encaminaron a la entrada.

Jungkook se inclinó en una de sus rodillas y se despidió de ella.

— Nos vemos más tarde conejita — besó su frente.

— Si papi — besó su mejilla.

Y con eso la pequeña entró a la escuela.

Iba a retirarse pero una señora se le acercó.

— Disculpe, ¿Usted es Jeon Jungkook, el padre de Nayeon?

— Si, soy yo — la miró extrañado.

— Soy su maestra y quería hablar con usted acerca de una situación con su hija.

— Claro, ¿Qué sucede?

— Sigame por favor.

Jungkook siguió a la maestra hasta una oficina, esta le indicó que tomara asiento y así lo hizo.

— ¿Que sucede con Nay?

— Lo que pasa es que los compañeros de su hija la han estado molestando mucho, como por ejemplo el que no tiene mamá o que tiene 2 papás, cosas así.

Jungkook se entristeció enseguida, todo eso era culpa de él, por llevar a Yoon a la escuela y por culpa del juicio no poder ir a hablar este tema con la maestra.

— Lo siento mucho maestra, es todo culpa mía, por asuntos personales la mamá de Nay y yo no estamos juntos y ahora estoy junto a un chico, es por ello por lo que se burlan — se tapó el rostro de la vergüenza, se sentía tan avergonzado de estar dándole un mal ejemplo a su hija

– No se preocupe por ello, solo quería informarle de la situación — dijo la maestra con un poco de lástima en su voz — Hablaré con los padres de estos niños y veremos si podemos llegar a una solución, no se preocupe.

Jungkook destapó su rostro, en el cual ya se habían asomado un par de lágrimas, al escuchar las palabras de la maestra.

— ¿Enserio? — un poco de esperanza se formó en su interior.

— Por supuesto, sólo quería informale en caso de que usted no estuviera al tanto, no se preocupe, ahora puede retirarse.

Jungkook le agradeció a la maestra y salió de la escuela.

Se encaminó a su casa para poder alistarse para el trabajo, pues empezaba a trabajar en un par de horas más.

Pero al llegar se encontró a Yoongi en la puerta de su casa.






























































¿Me aceptarías si yo... tuviera una hija? - KookgiWhere stories live. Discover now