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Capítulo anterior:

Y cuando estaba por pronunciar alguna palabra un estruendo se dejó escuchar por todo el lugar incluso a las afueras de este junto a un grito desgarrador lleno de dolor y angustia, rabia y enojo, tristeza y debilidad, junto a una pequeña risa que le ardió la sangre.

Lastimare a quién más quieres, así sentirás dolor.

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Pagarás por el daño que causaste.

Pagarás por el daño que causaste

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Estar en compañía de alguien era más agradable de lo que alguna vez imaginó, mucho más si se trataba de aquel chico tan pelicuar ante sus ojos, desde que su presencia había aparecido en su vida sus días habían tomado un rumbo bastante libre a su parecer, pasar muchas de sus tardes junto al chico de hermosos hoyuelos, escuchar sus tonterías y hablar de temas diversos sin aburrirse, aquello que antes de haberle conocido nunca imaginó hacer. Siempre se había sentido tan diferente y distante de los demás al tener una familia sobre todo padre tan estricto con sus horarios, salidas, proyectos y futuro, en otras palabras no era un adolescente universitario común, siquiera se había dado el tiempo para hacer amistades, todo era una completa agenda ocupada, más sin embargo la llegada de aquel chico de cabellera negra, contextura delgada mucho a su gusto, hasta parecía que debería comer más, se sonrisa hermosa en forma de corazón y sobre todo de buen carisma, a llegada de este a su vida lo cambió todo.

Eso hasta que las normas sobre su persona se volvieran más y más estrictas, demandantes con amenazas, llevándolo a tomar otro rumbo el cual le traería desespero, dolor, cansancio, depresión e incluso llegaría a lastimar a aquella persona que siempre estaría a su lado.



'No quiero arrastrarte conmigo a esta vida, por favor no me sigas Hoseok'













Sus fuerzas eran escasas más sin embargo eso no le impediría estar junto a su mejor amigo, compañero de vida e incluso podría ser algo más ¿Acaso había llorado en su vida? No hasta ese día.

Sus ojos apretados en la oscuridad, sus jadeos junto a sollozos claramente audibles, sus lágrimas derramadas con desespero, sin piedad y con mucho dolor junto a su fuerte y firme agarre alrededor de aquel cuerpo perteneciente a su mejor amigo, aquella persona que no importaba como fuera ni lo terco que era, de igual manera lo apreciaba más que a su vida, este le hablaba a susurros, en voz casi inaudible más todo aquello que le decía no era escuchado más la rabia en su interior era más. Por otro lado la oscura presencia de aquel tipo frente a ambos quien aún sostenía aquel maldito artefacto seguía con aquella asquerosa risa, una llena de maldad y desprecio, una que anhelaba la perfección a tales niveles de locura.

Su respiración aumentaba a cada segundo, volviéndose más y más frenética, apretó más su agarre alrededor de su amigo más aflojando este al momento, con lentitud dejó a un lado con cuidado a este último quien jadeo ante el dolor, quería detenerlo puesto que desde de lo hecho no te cabía duda que aquel tipo le pudiese dañar a él también, intentaba hablar más sus palabras salían apenas con un leve ruido, moverse más su cuerpo se negaba.

«Notice Me, Hyung» [Yoonseok]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora