-395 DÍAS

18 4 0
                                    

MOMO POV

Estábamos unos cuantos detrás de un coche grande y negro. Justo en la parte de atrás del circo de donde Sana y MinGi rescataron a los nuestros. Yo estaba sentada con mi espalda contra aquel coche, tocándome los dedos con nerviosismo y intentando concentrarme en mi respiración, relajándome y procurando que no se me notara que estaba atacada de los nervios.

SeungHun, el chico que habíamos secuestrado para que nos ayudara a entrar en aquella especie de circo y rescatar a los nuestros, había visto a su hermano en aquel sitio, así que esperábamos a que saliera a ser su descanso para llevárnoslo con nosotros.

-¿Todo bien Momo? – me pregunto MinGi sentado a mi lado, poniéndome una mano en mi pierna. Él me miró seriamente, era difícil ocultarle los sentimientos o emociones a MinGi. O por lo menos a mi siempre me fue difícil. Era un chico que te leía como si te tratases de un cuento infantil.

-Nerviosa por ver al ex, supongo – dije sonriendo ladina, y él me sonrió de vuelta.

-Lo entiendo – me dijo suspirando – no tendrías que haber venido si no querías – me dijo.

-No, no, tranquilo, puede que este herido y es mejor que este aquí – dije yo intentando sonar natural.

-Si – me asintió MinGi – además lo vuestro fue hace ya años.

-Si, si, solo estoy un poco nerviosa por todo – él me asintió y después volvió a mirar al frente.

Lo de JinYoung ya lo tenía superadisímo, ya no lo quería, ni mucho menos. Pero fueron muchas cosas las que vivimos juntos. Desde que el rechazara a su familia rica y pija, para que viviéramos en un piso de alquiler feo y casi derrumbado, hasta ese último día que lo vi.

Recuerdo sus ojos negros clavados en los míos, mirándome fijamente, parecían que no tuvieran vida, que nada de lo que había conocido de él quedara en su fino y escuálido cuerpo. Puedo incluso recordar la sensación de su mirada en mi cuerpo, como me sentía terriblemente sola y desamparada.  Después de aquel día no lo había vuelto a ver un par de veces, pero no estábamos solos, y mi mirada jamás se cruzó con la suya.

Pero, aun así, le tenía cariño, y prefería quedarme con todo lo vivido con él y lo muy feliz que me hizo, en vez de con nuestra trágica separación.

-Es él – dijo SeungHun señalando detrás del coche y mirándonos a los que estábamos con él. Que éramos MinGi, Sana, SeongHwa y yo.

-Vale – dijo MinGi asintiendo – metete ya en el asiento del conductor, y tú en la parte de atrás por si viene herido – me señalo.

Yo hice caso y metí en el coche. No miré hacia arriba en ningún momento. Solo me quedé allí, esperando a que vinieran. Mirando mis pies repiquetear contra el suelo del coche negro.

Escuché como se abría la puerta y entraba gente y no alcé la mirada.

-Pero bueno, que grata bienvenida – dijo su voz. Aquella que seguía siendo igual de oscura y profunda – hermanito, que majo de tu parte viniéndome a buscar, bro – dijo y escuche como se estrechaban las manos, después se dejó tirar en el asiento pasando un brazo por detrás de mis hombros.

Yo miré hacia mi lado. Y me encontré de nuevo con sus ojos negros, aquellos que me miraban divertidos y con un poco de entusiasmo. Pero que no engañaran a nadie, JinYoung nunca fue trigo limpio, sus miradas eran de soberbia y chulería, y estas se colaban entre sus ojos dulces y soñadores. Puede que fuera una de las cosas que más me enamoro, esa seguridad cuando me decía que iba a acabar besándome un día, mientras me miraba con esos ojitos de no haber roto un plato en su vida.

GAME OF SURVIVAL (ATEEZ ; TWICE)Where stories live. Discover now