Perseverancia

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El automóvil de la Reina llegó a la casa de los Azumabito por la mañana. Historia le pidió a sus escoltas que esperaran en la puerta. Kiyomi la acompañó hasta la habitación donde se encontraba Armin. Los chicos habían trasladado varias mesas y una silla a la habitación para poder acompañarle durante el día. Todos estaban allí reunidos cuando la Reina entró y se levantaron en señal de respeto.

Armin... - dijo la chica acercándose a la cama donde él estaba sentado. - No sabes cuanto lo siento, debí pedir que reforzaran la seguridad inmediatamente después de recibir la noticia... - Armin le cogió la mano amablemente y negó con la cabeza.

No fue tu culpa Historia, no tienes porqué disculparte - ella le sonrió afligida. Armin le contó que se encontraba mejor y que pronto estaría recuperado. - En cuanto la herida esté curada podré unirme de nuevo a las negociaciones.

Se hizo un silencio tenso, Annie miró a Armin, y él la miró a ella.

¿Qué? - preguntó él. - Hemos conseguido que alguien en esta isla esté dispuesto a dialogar, no podemos dejar perder la oportunidad.

Es demasiado peligroso - dijo Annie en tono seco, tras su aparente estado de tranquilidad se veía el miedo en sus ojos. Armin quiso rebatirlo pero Mikasa intervino antes de que pudiera decir nada.

Armin, si seguís interviniendo van a intentar mataros otra vez - dijo la chica con cierta preocupación. Armin las miró a las dos.

Lo cierto es que es un riesgo que no podemos negar Armin - dijo la Reina - Puedo intentar reforzar la seguridad entorno a las negociaciones, pero ni siquiera puedo estar segura de que no hay alguien entre la guardia real que pueda intentar haceros daño...

Estoy de acuerdo con Armin - salió Jean en apoyo de su amigo - Desaprovechar la oportunidad que nos va a facilitar la subcomandante Rheinberg es algo que no nos podemos permitir en la situación de conflicto global en la que se encuentra el mundo. - Armin le miró agradecido - Pero en tu situación actual, Armin, no puedes intervenir en las negociaciones, seria demasiado arriesgado. Nosotros iremos a las próximas reuniones por ti. - dijo Jean mirando a Connie, que asintió en silencio. Armin les miró y también asintió conforme.

Entonces en lugar de un herido tendremos tres - le rebatió Mikasa mirándole fríamente - En el mejor de los casos... - Jean le devolvió la mirada molesto.

Mikasa, es la seguridad y el bienestar de millones de personas lo que está en juego - le dijo Jean desafiante - bien merece la pena correr el riesgo, tu deberías saberlo mejor que nadie. - Jean se calló y se arrepintió enseguida del tono tan duro que había utilizado. Mikasa miró a Armin buscando su complicidad, pero su amigo parecía conforme con las palabras de Jean.

Es nuestro trabajo intentar encontrar una salida pacífica - le dijo él - Si abandonamos ahora les estaremos confirmando que pueden someternos a través de la violencia.

Mikasa negó desviando la mirada y salió de la habitación. Annie se levantó de la silla y salió tras ella.

Los demás se quedaron en silencio y Armin suspiró profundamente antes de retomar la palabra.

Creo que debemos hacer una demostración de que no vamos a detenernos por mucho que nos amenacen - dijo ahora mirando a Historia - Siento que tengáis que ser vosotros los que os expongáis esta vez chicos...

Hemos sido soldados, estamos acostumbrados a estar en primera linea, ¿verdad? - dijo Connie mirando a Jean que a su vez asintió.

Haré todo lo que esté en mi mano, contáis con todo mi apoyo - insistió Historia - Voy a dejar clara mi postura favorable al diálogo con el resto de naciones. - Los chicos la miraron y vieron la determinación en su mirada. Historia siempre había sido una mujer valiente, defendería su postura aun que aquello le costara estar en contra de gran parte de su propio ejército.

Natsukashii  (Jeankasa Storie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora