Capítulo 8.

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"Me pregunto. ¿Que era de mi vida antes de conocerte?"



Louis despertó sintiéndose en paz con él mismo. Abrió los ojos poco a poco acostumbrándose a la luz que se filtraba por la ventana e iluminaba su cuarto.

Intento moverse pero un fuerte brazo estaba aferrado a su cintura sin querer una sonrisa se posó en sus labios al saber que era Harry. Recuerdos de la noche vinieron a su mente.

–Buenos días, bebé –una voz ronca le susurró al oído.

Dio la vuelta encontrándose con el hermoso verde de los ojos del rizado. Sonrió de lado dejando ver un hoyuelo.

–Buenos días.

Se quedaron mirando mutuamente perdiéndose en los ojos del otro. Harry miro directo los labios del castaño. Se veían tan apetecibles. Se acercó lentamente, podía sentir su respiración chocando contra la de él.

–¡No! –Louis se alarmo quitando la cara.

Harry suspiro, sabía que iba muy rápido ¿Qué creía? ¿Qué se iba a dejar besar con tan solo algunos días conociéndose?

–Lo siento.

–No, no –Louis otra vez negó–. Es solo que –mordió su labio–, aliento matutino.

Harry rio.

–¿Cómo dormiste? –el rizado pregunto tocándose su mejilla suavemente.

Se encontraban frente a frente.

–Bien –susurro tímido por la penetrante mirada del ojiverde–. ¿Y tú?

–Espectacular –respondió con una enorme sonrisa.

Louis arrugo el ceño mirándolo.

Es que dormí contigo.

Las mejillas del castaño tomaron un bonito color rojo. Bajo su mirada mirando entre ellos. Ambos se levantaron de la cama. El castaño fue el primero en entrar al baño a hacer sus cosas.

–Bonito culo –Harry silbo.

Louis miro hacia abajo viendo que estaba todavía en bóxer. Tranco de un portazo mientras escuchaba la risa del rizado.

(...)

–Louis –Jay lo llamo seriamente.

El castaño entro a la cocina donde ya estaba su madre cocinando el almuerzo.

–¿Qué? –pregunto seco como siempre.

–¿Algo que quieras contarme? –su madre lo miro a los ojos dejando el cuchillo a un lado con el que cortaba las verduras.

–Hmm, no –Louis se hizo el inocente.

–Un vecino me dijo que te vio entrar con alguien y luego este nunca salió.

El castaño renegó al tener vecinos tan chismosos ¿Porque no se metían en sus propias vidas?

–Sí –murmuro–. Fue Harry. Pensé que no había problemas en que se quedara.

La cara de Jay cambio drásticamente al escuchar el nombre del chico alto con rizos en su cabeza.

–¿Harry? –ella pregunto sorprendida–. Oh, bueno, él puede quedarse cuando quiera no hay problema.

Louis levanto ambas cejas al oír aquello ¿Qué mosca le había picado? Mirando para todos lados salió de la cocina.

Tomo su teléfono dispuesto a escribirle a su ¿amigo? Sí, amigo.

"Mama está loca, lo juro"

Apretó la tecla de enviar y la respuesta fue casi inmediata.

"¿Por qué lo dices?"

"Cuento largo..."

"Podemos vernos"

Louis sonrió enormemente ante el mensaje. ¡Vería de nuevo al rizado! Aunque claro... lo había visto hace como una hora se había ido justo antes de que su madre llegara.

"Te espero en 10 minutos en la plaza, no tardes, príncipe"

Leyó el apodo bonito que le escribió el rizado y juro hacer una lista con todos los apodos cursis que él le decía.


Pide un deseo {Larry Stylinson} {Mpreg}Onde as histórias ganham vida. Descobre agora