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Las vacaciones de Jimin resultaron ser menos aburridas de lo que esperaba y todo esto fue gracias a sus amigos. Pues, aunque se sentía fatal por haber terminado su relación que realmente no era una relación, su mente estaba bastante distraída todos los días por actividades que sus dos mejores amigos habían planeado. No había tiempo para pensar en rupturas más que por las noches cuando estaba completamente solo y no había nada o nadie que impidiera que sus pensamientos terminaran en Jungkook.

Tal vez Jimin cantó victoria demasiado rápido, pues en la última semana de vacaciones, se encontró con que ninguno de sus amigos tenía un plan que realizar. Aunque claro, el trío era demasiado ingenioso y ocioso como para quedarse cruzados de brazos.

Hoseok, Taehyung y Jimin, terminaron por ir al supermercado con dos tareas bastante específicas en mente. La primera, comprar toda la fritura que pudieran comprar. La segunda, comprar tintes de cabello. Según los chicos, era cultura general el cambiar algo de tu cabello cuando querías cerrar algún tipo de ciclo y aunque Jimin estaba algo dudoso de dejar su cabello en manos de sus dos mejores amigos y experimentar con el cabello de ellos también, estaba demasiado aburrido como para no aceptar. ¿Qué podría salir mal? Al final del día el cabello crece y supera cualquier desastre. Nada saldría mal con su cabello, pero, cuando llegó al supermercado, otra cosa salió realmente mal y es que, todo el avance que había hecho para sacar a Jungkook de sus pensamientos pareció dar un retroceso de trescientos sesenta grados cuando se lo topó por accidente.

Vistiendo una sudadera enorme, pantalones holgados y un cabello oscuro algo desordenado, Jungkook se encontraba en el pasillo de frituras mientras observaba con nostalgia una bolsa de papas fritas. Jimin frunció el ceño, indeciso de sí acercarse o no, pero terminó por hacerlo y mediante un suspiro, sus pies terminaron por moverse de manera automática hasta Jungkook. Jungkook no lo vio venir, por supuesto que no lo hizo. Por lo que terminó enderezándose en su lugar mientras se alejaba del repentino toque en su muñeca. Jimin retrocedió quedando unos pasos lejos de un Jungkook y cuando este pudo percatarse de que era él y no un extraño, relajo sus hombros de manera natural.

Jungkook no supo que decir, después de todo, él pensaba que Jimin le odiaba aunque no lo hubiera dicho con esas palabras. Su cuerpo volvió a tensarse por su presencia y su mano comenzó a agitarse de manera nerviosa. Quería ver a Jimin, pero resultaba bastante raro hacerlo ¿Qué se supone debía decirle? ¿Cómo se supone que debería actuar? ¿Sería prudente decirle que extrañaba su compañía o eso sería tan agobiante para Jimin como lo era para él estar ahí parados sin decir nada?

—Jung —Jimin decidió hablar— ¿Estás bien?

Jungkook asintió.

—Lo estoy, solo no sé qué decir y es extraño para mí —se encogió de hombros—. Nunca había tenido un exnovio, es incómodo.

Jimin abrió los ojos en su lugar ante lo escuchado, se le olvidaba la facilidad con la que Jungkook hablaba sin filtro alguno. Exnovio. La palabra sonaba incluso extraña para él. Aunque no sabía si era porque jamás había sido el exnovio de alguien o solo porque en realidad, jamás habían sido novios.

—¿Me consideras tu exnovio?

Preguntó lleno de curiosidad por saber cómo el menor lo percibía.

—No sabía cómo llamarte en mis sesiones y mi terapeuta dijo que era una buena manera de hacerlo, después de todo, ella dice que nuestra relación fue igual a una —suspiró—.  Quería preguntarte primero si estabas de acuerdo, pero ella me ha dicho que tal vez lo mejor sería darte tu espacio.

—¿Es por eso que no has llamado ni una sola vez durante las vacaciones?

Jungkook asintió.

—Sí. Querías espacio ¿No? —sonrió—. Entonces te daré espacio y luego volveremos a ser igual que antes.

First Times ミ⚘ 𝐾𝑜𝑜𝑘𝑚𝑖𝑛Where stories live. Discover now