SERENDIPIA [completa]

CAPITULO 40

AMELIE

La semana después de navidad la pasamos entre trabajo toneladas de trabajo, para llegar al apartamento y meternos de lleno en toneladas de cajas de mudanza. Nick y Ana me ayudaban a embalar todo y de a poco íbamos llevando algunas cosas a la casa, y otras las vendíamos o regalábamos. Estábamos a miércoles y yo debía dejar el apartamento para el miércoles siguiente. Yo ya dormía todas las noches en mi nueva casa con Nick y solos veníamos al apartamento a buscar o guardar cajas, habíamos cambiado la celebración de mi cumpleaños en casa de mis padres por una en casa.

Hoy iríamos a la galeria de Nathan, había invitado a mis padres, a mi hermana y a Leah con Grant. No nos dijo de que serian sus imagenes pero nos aseguro que nos encantarían, por que a el le habían encantado. Ahora me encontraba subiendo las escaleras para meterme en una discusión con el infantil de Nicholas

-Campeón-dije abriendo la puerta de su despacho luego de tocar la puerta

-¿Que pasa pequeña?-dijo levantando la vista de su ordenador

-Debemos hablar de algo-dije mientras me acercaba a su lado del escritorio y me apoyaba de espaldas contra el

-Dime-dijo reposando su espalda en respaldo de su silla

-Es sobre los coches-dije con tranquilidad

-¿Que pasa con ellos?-preguntó frunciendo su entrecejo.

-Debemos vender alguno-dispare

-No venderemos nada, no tenemos ningún problema económico para no mantenerlo-dijo serio

-Nick...-intenté

-No Li, con la cantidad de plata que ganamos no es un inconveniente mantener cuatro coches

-Cuatro coches de alta gama, para dos personas-dije calmada

-¿Y? Es lo único caro que tenemos, después vivimos una vida promedio. Ni siquiera usamos ropa de marca-se defendió

-Tu sabras-dije dándome por vencida y levantándome del escritorio para irme

-¿A que hora debemos ir hoy?-preguntó cambiando de tema

-A las cinco-le dije mientras me paraba en la puerta-Quedaron muy lindos los nuevos trofeos

Nick se volteo y los observo, toda su pared tenia trofeos de las carreras. Todavía faltaban llegar los últimos y ya no había espacio para ellos.

-Si, no se donde metere los otros. Capaz los pongo en tu despacho, le darán un toque-dijo divertido volteándose hacia mi

-¡Ah no! De eso nada. Pondré algo sobre la pared pero cariño, ten por seguro que no serán tus trofeos

Nick rio y yo me fui del despacho, me dirigía a el dormitorio pero escuche sollozos en la habitación de Anastasia y decidí intervenir. Toque la puerta pero solo aumentaron los sollozos, entre cerrando la puerta detrás de mi y escanee el cuarto, había libros de estudios sobre la cama pero no estaba Ana. Camine hasta la puerta del baño y la escuche dentro.

-Ani ¿estas bien?-pregunte golpeando la puerta

-Si-sollozo mientras se escuchaba como prendía la ducha