•Chile Revengers• [Tokyo Revengers x Reader]

•Tal vez no sea tan malo•

-Se acabó...- Tomaste el palo de escoba y saliste por tu ventana sacando la mitad del cuerpo hacia afuera a golpear la ventana de la casa adyacente.- SON.- Golpe.- LAS.- Golpe.- SEIS.- Golpe.- Y MEDIA.- Golpe.- DE.- Golpe.- LA.- Golpe.- MAÑANA...

Por poco y se quiebra, ibas a dar un último golpe fuerte esperando a que te tomara en cuenta, pero la ventana se abrió antes y quién recibió el palo fue la cara de Baji.

-Chucha, pero como.- Se sobó la mejilla.- Acabo de despertar y así es como me recibí?- Saco ambos brazos hacia afuera, apoyándolos en el marco de la ventana mientras esperaba una explicación, como si la escandalosa música no fuese razón suficiente para enfadarse con él.

-Podí bajarle a la música?- Mientras intentabas entrar tu cuerpo por la ventana se te cayó el palo de escoba al techo del patio delantero, lo que te hizo explotar por la rabia del momento.- ¿Sabes qué? me tienes harta, podí ser un poco más considerado?

La música cambió de "Fanatica De Lo Sensual" a "La Vecinita".

-La vecinita tiene antojo~ Antojo que quiere resolver~ El vecinito le echa un ojo.- Cantaba el azabache apoyando una mano en su mejilla mientras te observaba poniendo todo tu esfuerzo en alcanzar el palo de la escoba.

Bufaste.- ¿Lo haces a propósito?, No puedo creer que enserio seas así...- Estabas por sacar una pierna por la ventana cuando él se te adelantó y caminó con cuidado por su techo hasta el tuyo para entregarte lo que se te había caído anteriormente.

Ibas a recibirlo pero apartó la mano un par de veces jugando contigo.- Lo queri? Agárralo po.- rió.

-Podí pasármelo porfa?- Te quedaste quieta esperando a que dejara de bromear.

-Soy pesá oe.- Nuevamente hizo como que te lo iba a pasar pero terminó apartándolo por última vez.

-Ya, dime la verdad... ¿Qué estás esperando que haga?- Cruzaste los brazos y lo miraste seria.

-Haceme nanai, acabai de pegarme sendo palo en losiko y esperai que me comporte.- Se apoyó en tu ventana mirándote directamente a los ojos, parpadeando lentamente.

Lo pensaste por un momento, no era algo tan difícil de realizar y si eso lograba hacer que dejara de molestarte sería suficiente para convencerte de hacerlo.

Estiraste tu mano con cautela para tocar su mejilla ligeramente hinchada.- Perdón... Si me pasé...- Centímetros antes de tocar su rostro la canción cambió.

-Hoy es noche de sexo~ Voy a devorarte nena linda.- Sacó su lengua y lamió tu mano rápidamente.

-¿Pero qué?...- Respondiste con una bofetada que no pudo esquivar.- ¡¿Por qué me chupaste la mano?!

-¡Estaba cantando no ma!- se sobó nuevamente la mejilla.- Por qué erí tan violenta cabra chica?!

Te limpiaste la mano en la camiseta ancha que usabas de pijama, le quitaste el palo de escoba y de golpe cerraste la ventana junto con la cortina... Que incómodo, no podías pensar en otra forma de describir la situación, resultaba que el vecino escandaloso ahora también era un pervertido, no podría ser peor, pero no podías permitirte conmoverte por ésto por demasiado tiempo, había que comenzar el día con todo.