•Chile Revengers• [Tokyo Revengers x Reader]

•Si, si la cagué•

Conchetumare...
Mierda, mierda, mierda...

¿Qué estaban haciendo ellos aquí?...

Tu cuerpo tembló por completo, pero por más que quisieras correr y que te tragara la tierra, tu cuerpo permaneció inmóvil.

La mirada sorprendida del rubio te dio un escalofrío de pies a cabeza...

Pero su reacción fue mucho mas inesperada de lo que creíste.

— ¡T/n!... ¡Vinisteee!— Te abrazó, aprisionando tus dos brazos pegados a tu cuerpo, para levantarte en el aire con una boba sonrisa alegre.

Tus ojos fueron a parar al rubio de la trenza que te miraba de una manera extraña...
Nunca habías visto a Draken analizar con tanta desaprobación a nadie...

¿Estaba decepcionado?...

Mierda, si que lo estaba...
Incluso evitó verte.

— Oye, pero... ¿Cómo cachaste donde vivo?— De pronto su interrogante le hizo bajarte otra vez, distanciándose para mirarte a la cara.

— Yo le di la dirección...— Baji alzó su teléfono para hacerle saber que se habían comunicado por mensaje... Cuando en realidad, nunca lo hicieron.

— Puta hubierai avisao pa irla a buscar po.— Se quejó Mikey, que daba pequeños brincos aguantándose las ganas de ir al baño.— Ya, ya, anda a sentarte, ya vuelvo, estábamos jugando con los cabros.

— Si, a escuchar al Shini cogiendo.— Se rió Smiley, echado en el piso mientras miraba la televisión con un videojuego en pausa, mientras su gemelo estaba sentado a su lado, comiendo gomitas ácidas.

— Cállate weon, que vergüenza le va a dar al Shinichiro si sabe que todos escuchamos.— Mitsuya estaba sentado en la cama, mirando por la ventana, sin querer meterse mucho más en la conversación.

Respiraste profundamente y te sentaste a un lado de Baji.

Mierda...
Otra vez maldecías para tus adentros...
Pero no había manera de arrepentirse de lo que hiciste con él...

¿Valía la pena ganarte el odio de todo tu grupo?...

— ¡Cabros, se me olvidó darle comida al Peke J y mi mami no está en la casa!... Nooo, ¡por la chucha!...— Chifuyu se levantó, desde el otro lado de Baji y salió de la habitación, con una expresión apagada...

Todos aquí lo sabían, a Chifuyu jamás en su vida se le olvidaría alimentar a su querido gato.

— Que es weon, se le va a terminar muriendo el gato, menos mal no es papá.— Se burló Baji, queriendo alegrar el ambiente, rodeando tu cuello con su brazo para apegarte a él, presintiendo que las miradas y la partida de Chifuyu te habían dolido...