Cap.22: Pizza, jacuzzi, tú y yo.

128 0 0
                                    

Quedaban unos 9 días para que me tuviera que ir, así que decidí que hoy sería el día en el que le pediría salir a Ander.

Me desperté un rato después que él, le di los buenos días y después de estar un rato en la cama despejándonos decidimos terminar de despejarnos dándonos una ducha. Tardamos bastante así que cuando salimos de la ducha ya estaban casi todos abajo, desayunando. Nosotros desayunamos también. Después fui con Carmen a hacer unos recados y cuando llegamos la comida ya estaba hecha.

Por la tarde decidí contarle a Werlyb que hoy se lo iba a decir a Ander, Markel y él me estaban ayudando mucho.

A eso de las 20:00 decidí llamar a Ander, le dije:

- Holaa, ¿estás ocupado?

- Holaa, pues no mucho la verdad, ¿por?

- Era por si te apetecía sacar a Oker en un rato, tú y yo.

- Me parece perfecto, ¿a y 15?

- Sii, te espero abajo.

- Okey chao chao chao.

- Chao chao.

Estuvimos paseando a Oker un buen rato, hacía muy buen tiempo y nos dio tiempo a ver el atardecer. Mientras paseábamos le dije:

- Oye, ¿te apetece que antes de cenar vayamos al jacuzzi?

- Mmm, ¿y si pedimos pizza, vamos al jacuzzi y cenamos tu y yo?

- Pues me parece aún mejor.

Volvimos a casa y pedimos la pizza a domicilio, avisamos al resto de que hoy no íbamos a cenar con ellos y los dos nos cambiamos para ir al jacuzzi. Decidí ir a jacuzzi porque allí fue donde nos dimos nuestro primer beso y me parecía bonito decírselo en el mismo lugar.

Una vez ya estábamos allí pusimos música para ambientar y las leds moradas, y después de estar un buen rato hablando y besándonos decidí decírselo ya. Así que le miré y le dije:

- Ander, he estado pensando que podríamos dar el paso de empezar una relación, estoy muy a gusto contigo, desde el primer día que llegué aquí supe que eras especial y creo que estoy preparada para tener algo serio contigo.

Ander respiró hondo, se recolocó mirando hacia mi y me respondió:

- Mira Laura, a mi también me gustaría, es más, me gustas, y mucho, pero en menos de 15 días vuelves a tu casa, y al empezar los estudios no vas a poder venir tan frecuentemente.
No sé, no llevo muy bien las relaciones a distancia, pero deja que me lo piense y no te desanimes, ¿vale?

- Puf, te entiendo la verdad.

Sabía que no me había dicho un no como tal, pero aún así no pude evitar que cayeran un par de lágrimas. Ander me vio y dijo:

- Ey no, no, no, pero no llores. - Mientras acercaba mi cabeza a su pecho -. Solo deja que lo piense, y si hace falta me mudo yo contigo. 

Me dio un beso en la frente y salimos ya del agua para cenar.

Fuimos al jardín a cenar, yo seguía un poco triste y notaba como él intentaba animarme.

Un Verano en IbailandWhere stories live. Discover now