Capítulo 20 travesura de Ángel

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Llegó el día en dónde Elena asistiría a la fiesta con Axel y se encontraba sin saber que usar, quería asegurarse de estar resplandeciente porque descubrió que el padre de Iris también irá con su esposa y las sobrinas de ésta.

En sus recuerdos estaba en que dichas sobrinas humillaban a Iris, siempre buscando dañar la autoestima de la chica. Elena sonrió al imaginar la cara de las perras cuando la vieran llegar.

Elena sentía un rencor genuino por esas mujeres, ya que cuando los recuerdos de Iris entraron en ella pudo sentir todo como si fuera la propia Iris.

Mientras estaba sumergida en sus pensamientos recibió la grata llamada de Ángel.

-Elena, ¿Sabes con quién hablas?

-Por supuesto. No eres una persona que deje una impresión débil, Ángel.

Elena pudo escuchar la hermosa risa de Ángel.

-Me alegra saber eso. Debo añadir que tú tampoco dejas una débil impresión.

Elena sonrió.

-En realidad te llamo porque me enteré que irás a la gala benéfica.

-Así es, ¿También irás?

-En realidad no, pero me preguntaba si ya tenías un vestido.

-Aún no.

-Veras un amigo mío está empezando como diseñador y si usas uno de sus vestidos en la gala lo ayudarías mucho a promocionarse.

-¿Estará a tiempo? La gala es hoy.

-Claro que sí, hay un vestido precioso que se que te quedará genial. Te enviaré la dirección del lugar.

-Perfecto.

Era el momento de empezar a actuar, de hacer lo que la verdadera Iris nunca tuvo el valor de hacer, pero que siempre estuvo gritando por salir desde sus entrañas, esa ira contenida a la cual Elena le daría rienda suelta.

Elena sonrió y se fue en su motocicleta al lugar que le había dado Ángel. Por fuera puedo ver una casa muy bonita y moderna.

Estacionó la motocicleta para caminar a la casa y tocar el timbre, al momento una rubia despampanante salió del lugar.

Ángel llevaba un body negro de encaje, una falda de cuero que iba hasta la rodilla, medias veladas y unos tacones rojos de punta, además su hermoso cabello rubio caía como una cascada, Elena no tenía lugar a dudas que es una mujer deslumbrante.

Por otro lado Ángel estaba fascinada con la belleza salvaje de Elena, su hermoso cabello rojo se veía alborotado y a la luz del sol parecía llamaradas, sus jeans a la cadera acentuaba su figura y su blusa de color terracota resaltaba sus ojos verdes. Ángel no pudo evitar pensar que entendía muy bien porque Axel había caído ante la hermosa pelirroja, no solo era hermosa, su presencia era abrumadora.

-Hola linda. Me alegra que finalmente estés aquí.

-Igual yo, no te imaginas lo que me costó encontrar el lugar.

-¡Mierda! Perdón, olvidé darte más indicaciones, es verdad que este lugar parece un laberinto.

-No te preocupes, de hecho me salvaste hoy porque no tenía ni la más remota idea que usar.

-Creeme que te va a encantar el vestido. Acompañe, te lo voy a presentar.

Elena siguió a Ángel al interior de la casa. Lo primero que vio fue una hermosa sala con un enorme mueble color champagne con unos cojines satín color verde esmeralda; un hermoso centro de mesa en vidrio y en el medio de éste un candelabro de bronce; una alfombra blanca que resalta en el suelo de mármol café oscuro.

NO SOY TÚWhere stories live. Discover now