Capítulo 2

1.7K 157 7
                                    

La música sonaba por todo el lugar, la sala común de mi casa estaba repleta de personas que en su mayoría no conocía, solo a los amigos de mi padre.

- ¡Oh! ¡Iris! Que hermosa estás -

- Usted también, señora Harrison, se ve espectacular, su atuendo le queda a la perfección - Dije sonriendo.

A ella parece agradarle mi halago y yo decidí irme hacia la mesa de bocadillos.

- ¿Comiendo tan temprano? - Me sobresalté al escuchar a alguien tras de mi pero suspiré al ver que solo era otro de los amigos de mi padre.

- Pues si - Respondí como mínimo.

Él se acerca y agarra mi mano para besar el dorso de esta.

- Se ve increíble, señorita - Dice.

Sonreí algo incómoda y saqué mi mano con delicadeza y disimuladamente la limpié con mi vestido.

- Gracias... -

Él se aleja cuando alguien le habla y yo resoplé aliviada, me alejé nuevamente pero en ese momento sentí una opresión en mi pecho que me hizo detenerme en seco y presionar con mi mano aquel lugar.

- ¿Qué... ? - Murmuré confundida. Nunca había sentido algo así por esa razón me confunde que lo sintiera ahora.

- ¿Cariño? ¿Te encuentras bien? - Me di vuelta al escuchar la voz de mi padre.

- Si, si... todo bien - Sonreí bajando mi mano y quise cambiar de tema - Te ves bien, papá - Lo abracé.

- Ah, gracias cariño. Tu eres la más hermosa de la fiesta - Dice besando mi cabeza.

Sonreí un poco y nos separamos, a él lo llaman unos amigos suyos.

- Iré con ellos, disfruta de la fiesta -

- Lo haré -

Vi como él se alejó hacia sus amigos y yo resoplé aburrida. Quería irme, pero al ser el centro de atención de esta noche, eso iba a ser un poco... complicado.

Miré a todos lados pero en ese momento sentí mi cuerpo erizarse y la opresión en mi pecho había vuelto, instintivamente miré hacia el gran ventanal de un lado de la habitación.

- ¿Pero qué... ? -

Abrí los ojos de par en par y me cubrí el rostro con mis brazos cuando el ventanal explota, escuché los gritos de todos y como empezaron a correr, alguien me empuja y yo caí al suelo quejándome.

- ¡Iris! -

- ¡Papá! - Grité levantando la vista pero noté su expresión tensa mirando a alguien tras de mi y en ese momento sentí a alguien agarrarme ambos brazos y la nuca por lo que no podía ver quienes eran.

- ¡Suéltenla! ¡Ella no tiene nada que ver en esto! - Dice papá.

- Devuélvenos lo que queremos, o no la volverás a ver - Dice alguien tras de mi.

- ¡Suéltenme! - Dije forcejeando pero los que me agarraban eran más fuertes - ¡Papá! - Él me miraba preocupado.

- ¡Señor! - Los hombres de mi padre entran y se acercan a mi pero los que me retenían se alejaron y salieron por la ventana.

- ¡¿Qué quieren?! ¡Déjenme! - Dije pero grité en el momento que estos saltan del salón el cual estaba bastante alto.

Cuando tocamos el suelo de nuevo, sentí el agarre en mi cuello y brazos aflojándose por lo que usé mis piernas para patear a uno, librando mi brazo y así estar por golpear al otro cuando noté algo.

- ¡Hm! - Al intentar retroceder me enredé con mis propios pies cayendo al suelo y me arrastré un poco - L..Licántropos... -

Veía sus orejas y cola lobuna sin creerme que los tenía frente a mi. Tres de estas bestias ahora mismo estaban aquí...

- ¡Iris! - Miramos hacia el lugar de donde venía la voz de mi padre quien estaba con todos sus hombres.

- Nos vamos - Uno de ellos, el que se veía con más presencia que los otros dos, se me acerca y me agarra del brazo levantándome pero en ese momento sentí como una corriente eléctrica pasando por mi cuerpo y no, no me refiero a de esas corrientes de los libros de romance...

Esta lo hizo abrir los ojos con sorpresa y soltarme, y a mí me hizo perder mis fuerzas, comencé a cerrar los ojos pero aquel licántropo fue lo último que vi y sentí cuando me atrapó antes de caer al suelo.

EL TESORO DEL LOBOWo Geschichten leben. Entdecke jetzt