Malas decisiones

Capitulo 24

"La carrera"

— Realmente estás loca —me dice Nick negando con su cabeza una y otra vez.

En estos momentos me encontraba en casa de mis abuelos junto a Nick comiendo tarta de frambuesa que nuestra abuela nos había preparado.

— Nick acompáñame solo serán unos segundos —le ruego por quinta vez.

La verdad era que le estaba pidiendo que me acompañe a mí y a Finn al lugar donde se realizaban las carreras.

— Solo iré con la condición de que me hagas tu pollo con papas al horno —me dice señalándome y yo pego un gritillo de alegría.

Lo dejo para que se dé una ducha y tome su ropa de dormir ya que arreglamos con nuestros abuelos que se quedaría a dormir en mi casa debido a que nos separaban minutos de carretera de casa a casa.

Nick baja con una mochila con sus pertenencias y luego de despedirnos de nuestros abuelos emprendemos camino a casa.

En el camino Nick me dio muchas advertencias de lo que podía sucede en aquel lugar y todas las prevenciones que debía tener pero cuando le dije que fui dos veces seguís su rostro se puso totalmente pálido y no dijo nada en el resto del camino.

Cuando abro la puerta de la casa escucho voces riéndose en el comedor y eso solo podía significar una cosa.

— Si te preguntan iremos a ver una película por la noche con Finn —le susurro a mi primo quien me ve con extrañeza.

Atravesamos toda la sala y cuando llegamos a la cocina todas las cabezas se giran hacia nosotros. Allí estaban todos los amigos de mi hermano incluyendo a él y a Nate quien me miraba sorprendido.

— Pensé que te quedarías en casa de los abuelos —me dice Zac a la vez que se lleva una palomita a su boca.

— Hubo cambio de planes —le digo con una sonrisa forzada.

— Iremos al cine junto a Finn —e sigue la corriente Nick.

Zac asiente convencido y yo busco del refrigerador refrescos para mí y Nick. Los chichos comienzan su plática nuevamente entre risas mientras lucho por abrir la lata de los refrescos.

Siento como un cuerpo se pone tras mío y al darme cuenta me encuentro con los ojos verdes de Nate mirándome. El estira su brazo y me ayuda a abrir los refrescos a i atenta mirada.

— Gracias —le digo mirándolo.

— Creo que quiero algo más que gracias —me dice con una sonrisa pícara acercándose hacia mí.

Soy mucho más rápida que él y me escapo por debajo de su brazo. Me giro y me lo encuentro mirando hacia al frente. Tomo el brazo de Nick y lo obligo subir a mi habitación para idear el plan de las carreras.

*****

Cuando la noche llego buscamos a Finn quien se adentra a mi auto con cara dormida lo que resulta que duerma en el asiento de atrás todo el viaje hasta el lugar donde se realizarían las carreras.

Llegamos al cabo de unos minutos y notamos la cantidad de gente que va ingresando al lugar. Finn se despierta y comienza a teclear en su móvil preguntando por donde están los chicos de la banda.

Nick toma mi brazo para poder entrar al lugar que se trata de un estadio abandonado el cual arreglaron como pista de carreras. Salto la valla del lugar y el ruido se comienza a escuchar.

Trato de ponerme una capucha así Nate no me reconoce y a los únicos que vera será a Nick y a Finn. Mi mejor amigo comienza a sacudir su brazo y cuando veo a lo lejos sé que se trata de los demás chicos. Vamos con ellos y cuando finalizamos los saludos la carrera comienza.

— Buenas noches a todos los que vinieron a presenciar la semi final de esta noche ­­—dice la voz por el altavoz—. Hoy se enfrentaran por un lado Niccolo Rici.

Al escuchar el nombre de Nico me quedo helada en mi lugar. Finn encuentra mi mirada inmediatamente al escuchar aquello. No sabía que el corría y me disgusta mucho enterarme así.

— Y por la otra esquina tenemos al invencible Nate Myers —grita con fuerza y toda la gente comienza a aplaudir.

Nate se sube a su motocicleta y habla atentamente con mi hermano y Derek. Esta sería la primera vez que vería a Nate correr y eso me pone los pelos de punta.

— En sus marcas, listos, ¡Fuera! —da inicio la carrera y Nate sale disparado rápidamente hacia la pista.

Los dos van muy parejos pero veo como Nico trata de pasarlo pero Nate se lo impide. Van los dos a la par nuevamente hasta que cuando casi llegan al final Nate lo pasa siendo así el ganador de la carrera.

— ¡Y el ganador es Nathaniel Myers! —grita emocionado y todos comienzan a aplaudir fuertemente.

Nate se saca su casco con una sonrisa enorme en su rostro. Los chicos los van a recibir abrazándolo entre todos.

— Tu novio sí que es bueno —me dice Sam y yo solo me quedo callada.

Vuelvo mi vista hacia en frente y noto como Niccolo se dirige a Nate hecho una furia. Él lo da vuelta y le da un golpe en su rostro. Nate reacciona y se lo devuelve con la misma intensidad empezando así una pelea entre ellos dos.

— Le está haciendo daño —le digo a Finn abrazándolo con fuerza.

­­Miro nuevamente y nadie lo está separarndo así que me suelto de Finn y corro hacia el para poder detenerlos. Siento como los chicos me gritan que vuelva pero lo único que puedo hacer es correr hacia Nate.

— Paren —les grito pero ninguno de los dos hace nada.

— ¿Astrid? —dice una voz a mis espaldas y al darme cuenta que es Zac me tranquilizo—. Mierda no debes estar aquí.

Al instante Finn y Nick llegan con los de la banda alarmados por mí. Me concentro nuevamente en Nate quien esta tirado en el suelo mientras Nico le pega tirado sobre él.

— Sepárenlos por favor —digo entre lágrimas.

Nick y Finn con ayuda de Sam tratan de separarlos y lo logran. Cuando Nate se para observo como su boca esta repleta de sangre por los golpes. El encuentra mi mirada y cuando me ve se queda sorprendido.

— Vaya así que ahora tu noviecita te defiende —lo ataca Niccolo mientras se para del piso.

Nate amaga en pegarle nuevamente pero Zac lo detiene.

— ¿Le has dicho la verdad Myers? —le pregunta nuevamente y Nate agacha la cabeza—. Te creía más inteligente Asti pero realmente lo que eres es una zorra.

Ni bien termina su frase es devuelto al piso por la golpiza que Finn le dio en su rostro. La gente comienza a irse debido a que la policía llegara en cualquier momento llegara la policía. Nate sujeta mi muñeca para dirigirnos fuera del lugar.

Cuando ya estamos afuera nos aparta hacia un lugar vacío donde la gente no pase. Me le pongo a ver detenidamente y veo como su labio sigue sangrando.

— Debes ir al hospital Nate —le digo mirándolo a los ojos pero el evita mi mirada.

— No andes con eso Astrid estoy bien —dice enfadado y me cruzo de brazos.

— ¿A ti que rayos te sucede? —le pregunto seriamente.

— Te dije que no debías volver a este lugar en tu vida Astrid y aquí estas nuevamente —me dice casi gritando y yo suelto una que otra lagrima.

Agacho la cabeza y me quedo en silencio mientras el suspira largamente.

— Astrid mírame —me ordena pero niego con la cabeza—. Venga no llores, no por mi rubia.

Él toma mi barbilla obligándome a mirarlo. Seca con sus dedos mis lágrimas y tira de mí para abrazarme.

— Iremos al hospitalpara que me curen y regresaremos a casa —me dice plantándome un beso en micabeza.