VI

77 5 1
                                    

— ¡Despierten! — gritó Aizawa desde fuera la puerta de la habitación. — ¡No me interesa lo que estén haciendo ahí dentro, solo les digo que ya está preparado el desayuno y tienen distintas actividades que hacer!

Uraraka e Izuku se levantaron de golpe y comenzaron a vestirse con la primera prenda de ropa que encontraron. Midoriya abrió el pequeño armario que estaba en la orilla de la habitación y encontró la ropa con la que llegó al Capitolio, por lo que decidió ponérsela de nuevo. Ochako, por otro lado, salió rápidamente de la habitación y cruzó el pasillo para encontrar otra, e inmediatamente la chica dedujo que era la suya. Hizo exactamente lo mismo: Se puso el vestido que usó en la cosecha y rápidamente salió de su habitación, coincidiendo con Izuku en el pasillo. Se acercaron a la mesa y se sentaron con la vista de Aizawa y Midnight sobre ellos.

— Pareces un fantasma. — dijo Midnight, rompiendo el pequeño silencio que se había formado desde la llegada de los dos chicos y refiriéndose al peliverde — ¿No dormiste bien?

— No pude dormir. — contestó rápidamente Izuku, sin dar muchas explicaciones. — Había algo que abrumaba mi cabeza durante mucho rato.

Uraraka giró su cabeza para poder ver fijamente a su mejor amigo: Definitivamente no había dormido en toda la noche, y ella ya tenía una idea de cual había sido el motivo.

— No me importa, yo tampoco dormí mucho anoche. — contestó Midnight, restándole importancia y sacando unas cuantas hojas de una pequeña carpeta que descansaba en la mesa. — Ya llegaron los programas, aquí tienen todas las actividades que habrán antes de los Juegos.

Ella se las extendió a los dos, para que las pudieran leer más detenidamente.

— Ahí dice claramente que faltan seis días para los Juegos: Los primeros cuatro serán de entrenamiento, luego se presentarán ante los Vigilantes, y al final serán las entrevistas.

— Tengo una duda. — dijo Midoriya, levantando levemente la mano. — ¿Qué es esto que dice "baile"?

— Oh. — contestó el mentor. — Dame eso.

Acto seguido Aizawa arrebató de las manos del chico su programa. Claramente ahí decía la palabra "baile" después de las entrevistas. Honestamente el hombre no sabía que es lo que era exactamente, por lo que decidió decirles la verdad.

— No lo sé exactamente, a ese evento los mentores no estamos invitados. De hecho, en mi lista no viene.

— ¿Y qué es exactamente? — preguntó Uraraka.

— Los tributos de años pasados me han dicho que es un... — el hombre no encontraba palabras para describirlo. — ...es un baile, en realidad. Es una especie de fiesta muy lujosa en la que todos se visten de maneras muy elegantes y bailan, comen, platican, entre otras cosas. Básicamente es como si el Capitolio hiciera que su última noche sea sumamente disfrutable para ellos. Yo no sé muy bien lo que pasa en ella porque en el año en el que fui tributo no hubo nada parecido a eso.

— ¿También se transmite? — preguntó Izuku.

— No, no se transmite.

La mesa volvió a estar en silencio. Los dos amigos murmuraban sobre la hoja que les acababan de dar, mientras que Midnight y Aizawa se miraban el uno al otro, esperando a que se percataran de que la primera actividad de la hoja comenzaba en unas horas. Aizawa se hartó un poco, por lo que decidió romper por fin el silencio.

— ¿Qué esperan? — preguntó.

— ¿Qué esperamos para qué? — preguntó Midoriya, ingenuo.

— ¿Ya vieron cuando inicia la primera actividad? — preguntó Midnight, ahogando una risa.

𝚑𝚞𝚗𝚐𝚎𝚛 𝚐𝚊𝚖𝚎𝚜 - 𝚋𝚗𝚑𝚊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora