El Admirador Secreto || [Adaptación]

〔 ❀ 〕TWELVE

ADVERTENCIA: El siguiente capitulo contiene mención de relaciones sexuales de manera explicita, tener relaciones estando ebrio y sexo sin protección, recuerden que solo es ficción.

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❛❛「 (手紙) Celos pt. 1」 ❜❜
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Estamos todos un poco raros. Y la vida es un poco rara. Y cuando nos encontramos con alguien cuya rareza es compatible con la nuestra, nos unimos con él y caemos en una mutua y satisfactoria rareza, y lo llamamos amor, amor verdadero

Mixtli entro a su casa la cual ya estaba bastante oscuro, en esta ocasión sentía que se había pasado de la hora que solía llegar. Quitándose los zapatos agarrándolos con una sola mano, yendo a su cuarto de puntitas o al menos eso trataba de hacer, no deseaba que la confundieran con un ladrón. Pasando por el estudio de su esposo noto que aun la luz seguía encendida, se cubrió la boca por instinto y paso lo más silenciosamente posible, rezando que esté no saliera de su despacho en ese instante. Cuando paso esa zona se percato que dejo de respirar por unos segundos, tomo una gran bocanada de aire; era obvio para ella que el ruso notaria su reciente llegada algo tarde mas tenía el beneficio de la duda para decir que no había llegado a la hora real, solo ocupaba preguntarle a Marí sobre a que hora se encerró su despacho su marido y mentir sobre que ella se presento unos minutos después. 

Se adentro a su dormitorio cerrando la puerta detrás de su cuerpo, respirando aliviada por lo que tiro sus zapatos cayendo en alguna parte de la habitación. La latina tomo su camisón blanco junto con ropa interior limpia, le apetecía un rápido baño; seco su cuerpo y se coloco su ropa para dormir. Saliendo del tocador no dio ni cuatro pasos cuando de repente el portón se abrió de golpe dejando apreciar a un Akim con la camisa  desabotonada de los primeros botones al igual que desfajada, la corbata desatada a nada de caerse, estaba más despeinado de lo usual y sumamente ebrio. La del apellido Balam quedo estática, era la primera vez que lo observaba en ese estado y por alguna razón sentía poco de temor, no lograba ni moverse. 

—Mixtli...—arrastro las palabras, jugo levemente con la puerta terminando por azotarla. 

Está brinco ante el golpe, el albino la miro con atención, la luz de la luna era lo único que iluminaba la alcoba que se colaba por la ventana, se empezó a acercar al cuerpo de la femenina en lo que ella retrocedía finalizando al momento que toco la pared, acorralándola; ese olor a alcohol era demasiado fuerte; desconocía que tanto había ingerido por lo que intento hacer las cosas con calma por precaución. 

—A-Akim, bebiste de más... Ven vamos a la cama, te ayudo—sus palabras eras suaves, tomo su mano con delicadeza para no exaltarlo. 

El eslavo seguía viendo y cuando sintió que su amada pretendía alejarse de manera brusca limito esa acción quitando su palma que había sujetado, poniendo ambas a lado del rostro de su esposa. La castaña dejo escapar un quejido por la reacción inesperada, la distancia era demasiado corta en ese instante, las narices de los dos casi se rozaban, su respiración era agitada mientras que la del hombre era tranquila. En ese punto la mano del albino acaricio de una forma gentil el rostro de la de orbes ámbar, mirándola con seriedad, sujeto su rostro entre sus manos y junto sus frentes a la par que cerraba los ojos.