• Three: Disoriented •

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Jay estaba boca arriba mientras miraba los stickers brillantes que adornaban el techo de su habitación. Daban más o menos las dos de la mañana, pero hace un par de horas se despertó gracias a una pesadilla. Su mente no hacía más que recordarle las palabras de esa persona cruel en su directo, hace unas cuantas horas antes.

Flashback.

-¿No harás otro directo? Las chicas se vuelven locas por verte de nuevo.

-No lo sé... ¿Y si aparece Billi.Poco09?

-Si aparece, lo ignoras. No debes dejar que una persona cualquiera te haga sentir inseguro. Eres nada más y nada menos que el Príncipe Park. Puedes con esto y con más.

Lo apoyó Hyunjin, mientras sacaba una lata de cerveza de raíz. Se sentó en el sofá junto al menor, quien jugaba con sus lentes. Había estado leyendo Edipo Rey, pero su primo lo distrajo. Se sentó, acomodó un poco su cabello y ropa, dejó los lentes a un lado y se dispuso a avisar que haría un directo en cinco minutos. Fue por una cerveza para así poder tener la mente un poco más relajada. Le puso play al directo. En un instante, miles de personas lo veían. Algunas suspirando, otras viéndolo con envidia, y otros con fastidio.

-Hola personitas. Me extrañaron, ¿Verdad? Eso no es pregunta; yo sé que se morían porque apareciera de nuevo.

Ambos estuvieron un rato hablando sobre trivialidades, hasta que decidieron responder algunas preguntas.

-"¿Esa sudadera es nueva?" De hecho si, la compré ayer en FILA.

-"Hyunjin Hyung, dígame que nunca se va a cortar el cabello". Puede que sí, puede que no. Depende de mis ánimos.

-"Jay oppa, la otra vez twiteo que se había enamorado. ¿Quién es la afortunada?"

El mencionado tragó con dificultad. Sus mejillas comenzaron a arder de inmediato, quitándole un poco esa aura de chico Narciso y serio. Digamos que Jay es un muchacho alegre, pero su expresión era la de alguien rudo. Era extraño verlo de aquella tímida manera.

-No les puedo decir su nombre, más sí puedo asegurar que caerá a mis pies tan rápido como un pestañeo.

Sentenció Jay, mientras las chicas chillaban, celosas. Llovían comentarios de "Que afortunada", "Quiero ser ella", e incluso "Llévalo a la luna por mi, chica desconocida". Lo que nadie sabía, era que a esa chica que le tenían en un pedestal u hoguera para hacerle brujería, era en realidad un chico adorable pero enojón, con unos lindos hoyuelos y ojitos brillantes. No se había podido sacar a Jungwon de la cabeza en todo ese tiempo. Le parecía tan tierna la manera en que en su tierna carita se dibujaban muecas de disgusto o asco. Era simplemente hermoso.

Del otro lado de la pantalla, el mismo pequeño que se instalaba en los pensamientos de Jay, tecleaba con rapidez una respuesta ingeniosa que lo hiciera llorar allí mismo. Era su percepción, pero no estaba muy seguro de que el chico hablara de una mujer, propiamente.

"Eres tan odioso que nadie te va a soportar. Yo que tú vuelvo a nacer, pero con una personalidad menos absurda. Por lo menos eres atractivo, pero no es suficiente :)"

Sería mentir si dijera que a Jay no le dolió. Fue como si una estaca se clavara en su pecho. Se podían meter con su aspecto, con su vida, con todo; pero que bromearan con su "vida amorosa" era como una patada en su mini Jay. El chico leyó el comentario, se vio claramente a su manzana de Adán subir y bajar con lentitud, además de que sus ojos adquirieron un brillo de tristeza. Jungwon supo que había metido la pata.

-Eh... Les cuento que el otro día fui al centro comercial...

Yang salió y tiró su teléfono al otro lado de la cama. Se sintió culpable por unos minutos, puesto que en serio se vio sensible ante ese tema. Paseó con la mirada por su cuarto, repleto de posters de Harry Potter. Debajo del televisor, su repisa con toda la saga en libros y películas estaba ordenada de manera perfecta, al igual que toda su habitación. A Jeongin le daba algo de miedo entrar ahí, ya que decía que Jungwon era un maniático del orden. Incluso a veces los llamaba Mónica, haciendo referencia a Friends. Se levantó de la cama y dejó caer su menudo cuerpo en la silla del escritorio. Podía sentirse mal, pero igual debía hacer la tarea.

You just want Attention [ʲᵃʸʷᵒⁿ]Where stories live. Discover now