Hasta Que el Por Siempre Se Desmorone

Antes de irnos.

—Siento que repetiré lo que dijo Natasha, pero está bien. Conocí a Michelle de golpe, es literal, me dio un golpe la noche en que nos conocimos, en vez de enojarme y reclamar la miré, pude ver como estaba asustada y a la vez avergonzada de haberme dado un puñetazo. Mientras más la conocía me daba cuenta de la fría que era con las personas a su al rededor, pero conmigo... conmigo era cálida, una persona totalmente distinta. Ella es mi persona para toda la vida, aunque hace unos años era la persona correcta en el momento incorrecto, ahora es la correcta en el momento correcto, hemos tenido nuestras diferencias, pero de alguna manera nos la arreglamos para estar en sintonía. Te amare hasta que el por siempre se desmorone y cuando este lo haga seguiré buscando más formas de amarte porque mi amor por ti jamás se terminará— dijo levantando su copa —Así que brindemos, por mi increíble esposa. Vendería mi alma por amarte una y mil veces más— alzó su copa y bueno... brindó junto a los demás invitados a la vez que me miraba.

Sonreí, como nunca antes lo había hecho, le sonreí a la persona de mi vida, a la persona que me acompañaría siempre y a la cual yo seguiría no importaba a donde fuera.
Steve regresó a la mesa y al sentarse a mi lado me abrazó fuertemente mientras besaba mi frente varías veces.

—Ahora, el momento más esperado por mi, los novios bailarán por primera vez como esposo y esposa— dijo Pepper al micrófono.

—¿De verdad dijo eso?— preguntó Tony.

—Pepper se preguntó lo mismo cuando diste tu discurso— respondió Rhodey.
Steve y yo nos levantamos al escuchar que la canción que habíamos planeado bailar este día comenzó a sonar. Look After You, la canción que habíamos escogido de último minuto hace algunos meses sonaba al mismo tiempo que nosotros nos levantabamos a bailarla, Steve tomo mi mano fuertemente, como cuando caminamos juntos hasta nuestra mesa, me miró, con un brillo en sus ojos y nos paramos justo en el medio del lugar. Las mesas de los demás invitados nos rodeaban y nosotros hicimos lo que siempre solíamos hacer, bailar.

Por años lo habíamos hecho, bailamos un sin fin de canciones en la torre e incluso en el complejo, pero esta era distinta, el camarógrafo se acercaba con su cámara para capturar el momento. Por eso era distitnta esta canción, este baile quedaría guardado en una usb, si lo hacía mal vería el error para siempre.

—Deja de pensar en eso, solo baila— me susurró Steve.

—Me conoces tan bien— comenté.

—Llevamos años juntos, es justo que ya sepa lo que pienses a este grado en nuestra relación.

—En eso tienes razón.

—Luces hermosa, y siempre nos hemos lucido al bailar, llevamos años haciéndolo.

—Eso también es cierto.

—Solo relájate ¿Si?

—Te prometo que lo haré

—Para sacarte de tus nervios, dime ¿Ya sabes a donde irémos?

—¿En la luna de miel? Creo que a París.

—Es un lugar muy romántico.

—A mi...—"A mi no me gusta" Ya lo sé.

—Deja de terminar todo lo que voy a decir— reclamé mientras reía.

—Lo siento, lo siento.

—Es que mamá escogió los lugares y yo solo escogí México.

—¿Por qué elegiste México?

—Bueno, México me gusta.

—Es lindo, pero la comida es picante.

—¿Como lo sabes?