17

686 78 5
                                    

La situación para Hyunjin pasó en cámara lenta, el ambiente era agradable hasta que escuchó la voz de Felix, la última que quería escuchar en ese momento.

Este se lanzó a él para abrazarlo y sentarse en sus piernas sin previo aviso, parecía estar muy feliz, o no entendía que sucedía.

Pero su única reacción fue mirar hacia Jeongin. Habían avanzado tanto los últimos días que no quería retroceder por un australiano entrometido.

Y fue notorio el cambio de ánimo del chico, vio como se puso ¿triste? sí, eso parecía. No se veía celoso, solo ¿decepcionado? No lograba descifrar bien que pasaba con él.

Se mantuvo tan distraído analizando a Jeongin que no recordó lo más importante, quitarse de encima a Felix. Cosa que hizo apenas reaccionó, bajando al menor sin ser brusco.

Y en cuanto hizo eso, Jeongin ya se había ido.

— Felix, ¿qué haces?— preguntó con poca paciencia.

— ¿De qué? ¿Me estás escuchando, JinJin?— hizo un pequeño puchero —Te estoy diciendo que estuve buscándote en todo el recreo, ¡Te extrañé mucho!

Bueno, eso no habrá ayudado mucho a los sentimientos de Jeongin.

— Lo siento, Lix. Estaba con Jeongin, y si me disculpas, iré a buscarlo.— se levantó pero el peliblanco lo tomó de la mano, pudo notar fácilmente como su cara pasaba a una enojada.

— Todo el tiempo estás con ese Jeonjin, o como se llame, ¿ya no quieres estar conmigo? Estoy seguro que puedo ser mejor que él.

Hyunjin no podía creer que ese era el Felix que conoció unos años atrás.

— Jeongin me gusta, Felix. Y quiero estar con él todo el tiempo que sea posible, y eso es algo que a ti no tiene que importarte porque tú y yo no somos más que amigos, o eso éramos.— su tono fue firme y serio.— Si me disculpas, iré a buscarlo.— se soltó del agarre de forma brusca y se fue de ahí.

Jeongin estaba triste, desconcertado, decepcionado, enojado, frustrado, era un lío de emociones, y todas negativas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jeongin estaba triste, desconcertado, decepcionado, enojado, frustrado, era un lío de emociones, y todas negativas.

Se detuvo en la parte trasera del colegio, no había nadie ya que las clases habían comenzado de nuevo.
Se sentó en el piso y abrazó sus piernas contra su pecho, el cual subía y baja rápidamente.

Sentía que el aire le faltaba y también sentía un enorme nudo en su garganta.

No pasaron más de 10 segundos cuando ya había comenzado a llorar, se sentía increíblemente mal, ver al chico ese en las piernas de Hyunjin había sido la cosa más incómoda e insoportable que había visto en un buen tiempo.

La forma en que lo abrazaba y que se sentó con tanta confianza lo hacía dudar de todas las cosas que antes habían pasado con el rubio, quien cabe aclarar, en ningún momento que Jeongin estuvo junto a ellos lo bajó de sus piernas o hizo algún gesto de disgusto.

No sabe si también había quedado sorprendido o solo no le molestaba, pero se quedó tieso, como si el hecho de tener a un peliblanco encima suyo no fuera nada, fuera cosa de todos los días.

Más la forma en la que la voz chillona e insoportable del peliblanco pronunciaba su nombre y repetía "Te extrañé mucho, Jinjin." "¡Jinjin, te extrañe~!"

"JinJin, Jinjin, JinJin" jodido apodo de mierda, estaba en su cabeza repitiéndose una y otra vez.

Su cabeza era un mar de dudas e inseguridades, porque no entendía, realmente no entendía quien era ese chico, y por qué había llegado a arruinar su buen momento.

Necesitaba respuestas, necesitaba preguntarle, reclamarle, gritarle a Hyunjin, pero no se permitía exigir nada, sentía que quedaría como un idiota, porque aunque habían confesado sus sentimientos, ellos seguían sin ser nada, sin tener un compromiso.

Pero realmente necesitaba aclarar sus dudas, hace muy poco se habían declarado mutuamente, y ahora se metía este chico que no conocía y que era malditamente insoportable.

Necesitaba saber quien era y que tenia que ver con Hyunjin, porque sentía que alguien sobraba ahí, y esperaba no ser él.

Jeongin sabía que solía ser exagerado, que solía ser inmaduro, y dramático algunas veces, pero estaba seguro que esta vez no exageraba, ese peliblanco le había quitado la poca estabilidad emocional que había logrado conseguir.

Suspiró secando sus lágrimas y se sobresaltó al escuchar esa jodida voz que amaba y reconocía a la perfección.

— Jeongin...

Mierda, ahora no.

Blonde Hair ➳ HyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora