34- Pasando un momento agradable

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Amelia

El mismo día ,minutos después

Siempre me a perecido impresionante el arte de asesinar , siempre e visto la muerte de una manera distinta a como la ven los demás , para mi la muerte siempre a sido parte fundamental de mi vida , ya que siempre a estado presente .

Por eso el hecho de tener a mis tíos , los ocasionantes de todo mi dolor y sufrimiento , atados a una silla suplicando por su vida , hace que me sienta feliz y a gusto conmigo misma .

Saber que tengo la vida de ellos en mis manos , saber que puedo acabar con las vidas de las personas que me ocasionaron tanto dolor y sufrimiento , aquellas personas que no me permitieron tener a mis padres y que después de quitarmelos no me dejaron enterrarlos , hace que quiera sacarles los ojos .

- Sofi , por favor - suplica Edward

- ¡Que no me llames Sofía! - le digo y le entierro el cuchillo en el muslo izquierdo , ocasionando que grite de dolor - Sofía se llamó mi madre , madre que tu me quitaste - le recuerdo y le sacó el cuchillo del muslo

- Amelia , querida sobrina , perdonanos - ruega Isabela y el verla rogando me hace muy feliz

- ¿Para que? , para que vayan a quitarles a otros hijos sus padres - les digo mientras me doy la vuelta por las sillas en las que están .

Edhem sonríe con orgullo , Andy sólo me mira sin demostrar ningún tipo de afecto , pero Mishel por otro lado carga una sonrisa macabra en su rostro , si la miras bien , nadie imaginaria que aquella chica pequeña de cabello negro y largo color azabache , con mejillas rosadas , pestañas largas , labios rosados y carnosos , de tes blanca casi pálida y ojos negros como la noche , es capaz de asesinar a más de diez hombres ella sola , cualquiera que la viera pensaría que es inofensiva ya que parece la típica chica de un cliché romántico a la cual hay que proteger .

Pero eso es lo que la hace pasar desapercibida delante de las personas , ya que al tener esas características de niña buena todo aquel que la mira pensaría que no a asesinado ni una mosca , pero la verdad es que fue capaz de asesinar a 15 guardias en mi casa sólo para liberarme .

- No te bastó con haber asesinado a nuestra hija - dice Edward molesto

- Eso sólo fue el comienzo de mi venganza - les dejo claro ese punto

- Amelia por favor , por los momentos que vivimos juntos - alega Isabela y eso me pone muy furiosa

- ¿¡Que momentos!? - espeto - los momentos en los que asesinaron a mis padres o los momentos en los que planearon asesinarme a mi por el dinero que tenía , cual momento ¿eh?- les gritó para luego apuñalar a mi tía en el hombro , cosa que hace que suelte un grito ensordecedor

- Por favor Amelia , lo sentimos - me suplican

- Enserio lo sienten - bajo la voz para sonar triste

- Si , si lo sentimos mucho - se apresura a decir mi tía

- Pues que lastima - les digo y estoy a punto de clavarle el puñal a mi tío en el pecho pero......

- Si le clavas ese puñal en el pecho el morirá y se acabará la diversión y no es justo por que ellos deben pagar por lo que te hicieron - Mishel me detiene la mano antes de llegar al pecho de mi tío

Mishel me suelta la mano y se acerca a mi tío para sacarle la venda de los ojos , luego se acerca a mi tía y hace el mismo procedimiento , pronto mis tíos están sin las vendas mientras me miran a mi y a Mishel .

- Quiero que presencién con sus propios ojos quien es la persona que los asesinara y porque lo hara - les dice Mishel mientras toma otro cuchillo de la mesa .

AmeliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora