'ULLIEL' // COMPLETA

4.1

Acabo de salir de casa de Ulliel, y en teoría, también la mia. No puedo creer todo lo que ha pasado en apenas un par de horas. Y de todo lo que me he enterado.

Creo en todo lo que me ha dicho? Al principio, no, ahora sí. Confío en él. Me ha enseñado fotografías que prueban gran parte lo que me ha explicado, y aunque no me las hubiera mostrado, las direcciones que el contacto de Christoph le envió, coinciden.

Me ha sorprendido que fuera embalsamador de cadáveres, no le pega, le pegaría más ser modelo o algo así... y al principio me he asustado, y he temido por mi vida. Sabe cómo hacer desaparecer cadáveres. Y si las cosas no hubieran salido como han salido y hubiera querido matarme? Contraatacar? Hubiera muerto, y nadie hubiera sospechado de él, al menos nadie podría culparlo directamente, sin pruebas. Solo Christoph sabía cuál era mi paradero.

Mi punto de vista con Christoph ha cambiado mucho. No confío en él y debo tener cuidado. Ulliel tiene razón, tengo que empezar a vivir mi vida, y quiero que él forme parte de ella. Quiero pasar tiempo con él, que se yo, ir a tomar algo, al cine... hemos pasado demasiados años separados y quiero recuperar el tiempo perdido.

Estoy preparada para encararme con Christoph, ahora que sé que no estoy sola, me siento más fuerte, y capaz de todo. Quiero empezar a escribir la historia de mi vida.

Estoy de camino a casa, ya no llueve. La katana reposa tranquila en la funda del violonchelo, y creo que no voy a necesitarlo, al menos durante una temporada.

Lo primero que voy a hacer es ir a casa de Carol, le va a extrañar que aparezca así de la nada y a estas horas, pero debo decirle que ha pasado, a mi manera claro está, y pedirle que me encubra, estoy segura que lo hará, y que Christoph no le va ni a preguntar. Rezo para que se crea que Ulliel no estaba en casa. Mañana se lo contare, cuando vaya a comer. Temo su reacción, pero ahora que sé que tengo otro hogar en el que poder acudir, iré sin pensármelo dos veces.

Llego a casa, la calle está completamente en silencio. Amo Francia por cosas como esta, la tranquilidad. Abro la puerta y dejo la funda del violonchelo dentro, y cierro.

Espero que Carol este despierta, seguro que está viendo alguna serie, esta enganchada a muchas. Llamo al timbre. Mentalmente rezo para que abra la puerta, y la abre, en pijama, despeinada y con un bol en la mano.

- Isabelle? Que haces aquí? Tu no estabas con tu padre de fin de semana?

- Han pasado cosas. Puedo pasar?

- Claro, pasa.

Entro. Carol cierra la puerta, y continúa comiéndose los cereales.

- No tengo mucho tiempo, necesito que me encubras.

- Vale.

- Si mi padre te pregunta, he pasado toda la noche contigo.

- Puedo preguntar... que ha pasado? -con la cuchara en la boca.

- Es complicado Carol... pero... -trago saliva, tensa. Debes prometerme que no le vas a decir nada a nadie.

- A quien quieres que se lo cuente? Tu eres mi única amiga. Mi vida se basa en ver series y salir de fiesta una vez al año.

Sonrio.

- Lo prometo -dice subiendo la cuchara.

- Gracias

- Que ha pasado?

- Lo único que te puedo contar por ahora es que he hecho algo parecido a un amigo...