Capítulo 10

14 2 2
                                    

Asher

Mierda. Malditos vecinos escandalosos, me recuerdan que no he tenido sexo en días. Es un día muy jodido, nada fuera de lo normal. Todo cambió desde que mi querida pitufina nos dejó, y joder como dolió perderla.

Me encariñé de esa enana en poco tiempo, es que era simplemente genial, y hay que darle crédito pues nos soportó a toda esta bola de idiotas por cuatro meses, o más. Sé muy bien que fuimos parte de su malévolo plan, nunca planeó establecer lazos pues después se daría a la fuga, pero aun así no es fácil lidiar con tres adultos inmaduros, estúpidos y con una rubia egocéntrica hasta los pies.

Por mi parte he intentado mantener a flote nuestro querido grupo, a nuestra pequeña familia disfuncional. Una familia que ahorita se encuentra de la mierda, juro que si no fuera por mí ya estarán acabados. Louis está preocupado por su noviecilla, no sé cómo es que no se da cuenta que a ella él no le interesa ni un pito.

Pero el amor es ciego y esas babosadas. Amanda se siente culpable, en el trabajo hasta parece sumisa, intenta redimirse de sus actos siendo buena con todos menos con ella misma. En un escenario diferente lo disfrutaría pero extraño a la rubia salvaje que era antes.

Pero todo eso no supera a mi hermano de otra madre. Aarón o Matteo, como sea que guste más, él sí que está cayendo bajo. Desde un inicio siempre supe que esto saldría mal pero estaba genuinamente feliz de que él al fin estaba obteniendo algo bueno, yo lo vi cruzar por la muerte de su madre y de su hermana, vi cómo se hundía repetidas veces en el abismo.

Después de lo de su madre se encargó de cuidar de su hermana pues a su padre no parecía importarle una mierda. Así que entre los dos cuidamos a esa niña, vi como tuvo que madurar antes de tiempo por ella y ¿para qué? ¿para que se la arrebataran unos años después? Hombre es que eso si está jodido.

Emma, porque así le gustaba más, era una niña inocente e indefensa que no merecía la trágica muerte que le tocó sufrir. Y yo tuve que ver como sufría en ambas, las veces que fui a su casa a evitar que se intoxicara de más son incontables. Louis se integró al grupo unos años antes de que falleciera la querida Emma, así que también lo vio sufrir.

Puedo jurar que a veces tengo pesadillas horribles sobre Aarón, es literalmente como un hermano para mí, mi hogar era una alcantarilla. No, una alcantarilla hubiera sido mejor que esa porquería de hogar que me tocó. Mi padre era un alcohólico y mi mamá una mujer que se vendía a si misma para poder drogarse, mi padre la golpeaba y luego yo me entrometía y me golpeaba a míBla, bla, bla.

Gracias a Aarón podía escaparme de casa, iba con él y me hacía olvidar los problemas en casa. Le debo la vida a ese imbécil, entré a la mafia cuando cumplí dieciséis y me fui de casa. Se volvieron en mi única familia.

Así que ver como sufre de nuevo es como si no estuviese cumpliendo con mi labor de hermano. Ella lo hacía feliz, él la hacía feliz a ella ¿por qué no puede terminar ahí? No, tenían que guardarse secretos y ser exactamente igual de orgullosos, tenían que ocultarse las cosas.

Me preocupaba que los dos salieran heridos al final y aun así los dejé ser felices mientras duró. ¿Está bien que sienta que en parte es mi culpa? Es decir, yo lo sabía y no hice nada.

En fin, Aarón volvió a las drogas después haber estado sobrio por dos años. Sí, fue mucho trabajo hacerlo parar pero finalmente se logró y ahora no sé cómo detenerlo, es que es una patada en el culo cuando se pone así. No acepta ayuda de nadie y es muy difícil darse cuenta cuando está drogado, tiene una tolerancia increíble el muy bastardo.

Igual, lo he visto hace dos días y no parecía haber tomado nada. Me di cuenta porque se ve cansado y a la vez ansioso, trata de ocultarlo pero lo conozco bien y estoy casi seguro de que algo bueno pasó, más no sé qué es.

Así que aquí estoy, en Emma's, bebiendo como un imbécil. Me gusta beber, pasar un buen rato, más no me gusta ir a los extremos. No voy, ni planeo ser como mi padre.

Así como Amanda lidia con su culpa, Aarón con drogas yo lo hago viniendo aquí. Me siento libre aquí, como si nada importase aquí abajo, todos siempre están relajados y no causan drama alguno. Además, me siento cerca de mi pitufa, aquí la pasamos bien.

Como aquella vez que cantamos sobre los sofás, cuando besé su cuello, cuando se acurrucaba a mi lado, cuando contaba sus tontos chistes. Era reservada y ahora se el porqué, pero eso no le evitaba divertirse y alocarse un poco.

Vaya que sí, eso sí, cuando se enojaba Espera, nunca la vi enojada ¿o sí? Igual ya no importa, se fue, ahora estoy solo sin una compañera igual de divertida que ella. Joder que deprimente.

No sabía que eso de la tristeza te quitaba las ganas de tener sexo. Odio estar deprimido, no me causa ningún placer cuando lo hago, es una maldita pena. Bailé un rato con unas chicas semi desnudas, besé a una que otra por ahí, bebí unos tragos por allá y finalmente me aburrí.

—¡No te vayas! —pidió la chica sentada sobre mi regazo.

—Lo siento, nena, pero soy un hombre de negocios—dije socarrón.

—Anda, quédate y podemos hacer algo más productivo—dijo seductoramente.

—Tentativo, pero no.

Me levanté, dejándola ahí en el sofá. Cuando iba de salida noté como alguien se escondía en un callejón. ¿Qué tenemos aquí? Me acerqué hasta ahí y encontré a un tipo con una cámara, se la tiré al suelo y lo pegué contra la pared.

—¿Qué haces? —murmuré.

—N-nada

—No chilles y responde, imbécil—musité.

—No estoy h-haciendo nada, señor.

—¿Señor? A ver ratita, o hablas o te hago hablar, tu escoges.

—N-no me hagas daño—pidió—¡Solo sigo órdenes!

Mhm Ahora sí me interesa.

—Hablas o te hago hablar—repetí.

—Él me pidió que los vigilara—murmuró—A los cuatro No solo a mí pero

—Hijo de puta—murmuré.

Lo golpeé y lo subí al auto, esta mierda la debe saber Aarón. Ahora nos vigilan, genial, no se puede tener un poco de privacidad en esta vida. Fui hasta la casa de Aarón y cuando llegué me sorprendió no ver ninguna bolsa de cocaína en la mesa o algo por el estilo.

Sin embargo, lo encontré en el suelo temblando y respirando agitadamente.

—Mierda, ¿qué te pasó?

—Vete de aquí—musitó.

Lo ayudé a ponerse de pie y lo llevé al sofá. Busqué en su cocina algo de comida y agua, no había nada pero si una manzana y una botella de agua, me sirve. Se lo di y esperé a que lo comiera.

—Cómetelo que no te lo voy a dar en la boca.

Después de un rato logró calmarse un poco, mierda se ve demacrado.

—¿Qué haces aquí? —preguntó de pronto.

—Gracias, de nada—dije con ironía—Vine a dar malas noticias.

—No es el momento.

—Teniendo en cuenta que tengo a un hombre inconsciente en la cajuela desde hace veinte minutos, to diría que sí—solté sin más.

Ser directo es mi especialidad.

—Si serás imbécil.

Después de eso trajimos al pobre hombre hasta la sala y comenzamos a interrogarlo, no fue tardado pues, o es muy cobarde o es inteligente pero, soltó todo a la primera. No hubo necesidad de usar la fuerza bruta, por segunda vez.

—¿Nos están vigilando? ¿Quiénes son?

—No sé sus nombres pero quedamos en vernos mañana por la mañana para enviar la información—respondió.

—¿Y cómo esperas que te crea?

—Porque valoro mi vida.

—Genial, mañana nos llevarás a ellos—agregué.

Dangerous Love #1.1©(Completo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora