28 | Suave y firme.

794 37 7
                                    

28 | Suave y firme

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

28 | Suave y firme.

Los días restantes de la semana estuve a full en la oficina, nada raro si me lo preguntan. Mientras yo me encargaba de mi trabajo, Gokari, su madre y la mía pasaban mucho tiempo juntas, veían todo lo referente a la fiesta. Mi madre le había dicho a la señora Milk que ella se encargaba del auditorio pero lo único que me dijo fue; asegúrate de que este desocupado y el servicio de catering disponible para ese día. Fue todo.

Y claro, no estaba libre esa noche por lo que tuve que hacer malabares para pasar el evento que se llevaría acabo ese día a otro más al centro de la ciudad. Pero al final del día lo había conseguido.

—Aquí tienes. Libre y disponible el servicio de catering. —le dije a mi madre esa noche una vez que llegue a casa. Dándole una hoja con el logo de la corporación en toda la hoja como marca de agua.

—Gracias cariño. Descansa. —se levantó y se alejó hablando por teléfono. —Tengo libre el auditorio, una cosa menos que borrar de la lista. — Le decía a la otra persona, seguramente Milk.

Suspire y me deje caer en el sillón. Claro no supuso ningún problema para ella por qué lo hice yo.

Durante el fin de semana estaba feliz de ver a Gokari por que ahora que su padre sabía de lo nuestro podía acercarme a ella sin ningún problema. O eso pensé, puesto que él no la dejaba ni un ratito. Ni siquiera pude darle un beso de saludo, él me miró muy serio y mejor mantuve la distancia. Después se fueron para ver lo del banquete y nos quedamos con Goten en la sala de juegos, mientras él se burlaba de mí diciendo que su padre no iba a aceptarlo así como así. Y mostrándole el dedo medio un par de veces seguimos jugando hasta que regresaron por la noche, en seguida nos sentamos a cenar mientras los sayajines puros devoraban todo en la mesa.

Al día siguiente pretendía ir con ellos, pues era el día de comprar los atuendos y por supuesto que no iba a perderme el que ella se probara varios vestidos, pero mi padre tenía otros planes, ni siquiera los vi pues entramos muy temprano a la cápsula de gravedad y pasamos ahí casi todo el día. Al salir tomaban té con mi abuela mientras varios sirvientes llevaban las bolsas de ropa a las habitaciones donde se quedarían la noche antes de la fiesta.  Solo salude con un buenas tardes y mi madre me mando a bañar.

Ella me dedicó una mirada profunda mientras comenzaba a alejarme y cuando la perdí de vista suspiré frustrado. Era más difícil verla ahora que su padre sabía lo nuestro que antes cuando lo manteníamos en secreto. Antes de comenzar a subir las escaleras me tomaron del brazo deteniéndome y recargándome en la pared aún lado de estas sentí sus labios sobre los míos. Y sin pensarlo un poco pase mis brazos al rededor y la estreche contra mí,  mientras nos besábamos.

Al separarnos con la respiración un poco agitada hablo.— Debo volver. Pero moría por besarte.— Así que lo hice de nuevo más despacio esta vez, dejándonos a ambos disfrutar de los labios del otro. —¡Trunks!

Un Destino Inevitable POV TrunksWhere stories live. Discover now