Capítulo 4: Rechazo

359 50 8
                                    

Intentando no pensar en nada, cerró la ducha y tomó una toalla. Secó sus hombros y pecho. Secó sus piernas y su cabello. No quería pensar en nada y realizar tareas rutinarias lo ayudaba a estar ocupado y lejos de su cabeza.

Así debía ser, pero de noche, en aquel apartamento y en aquella cama no podía acallar lo que dentro de sí era un grito embravecido.

Nunca había festejado su cumpleaños y sinceramente no recordaba su fecha de nacimiento. Eso no le importaba, pero durante aquel primer año con los Uzumaki, luego de un entrenamiento en el bosque, mientras descansaban, el Séptimo se lo preguntó:

-Buen trabajo chicos-
-papá, ¿no tienes trabajo?-agotado.
-Shikamaru decidió ayudarme sólo por hoy, y me pareció una buena oportunidad para entrenar con ustedes-
-como sea, iré a caminar-malhumorado.
-espera Kawaki, a decir verdad, me gustaría consultarte algo-
-¿a mí?-
-¿qué te gustaría de presente?-
-¿presente de qué?, ya fuimos al lago-
-no me refiero a eso... hace más de un año que estás con nosotros y...-
-¿empiezo a ser una molestia?-
-claro que no-sonriendo.
-entonces... ¿por qué me darías un presente?-en un tono más pausado.
-tu cumpleaños-
-...-
-podríamos hacer algo hoy... bueno, sí quierés o podríamos...-
-no me interesa-

Apenas dijo esto, el muchacho se marchó perdiéndose entre los árboles y arbustos del bosque.

-¿y sí me lo das a mí?-
-¿qué?-
-el presente que es para Kawaki... sí es un nuevo videojuego, podrías dármelo a mí-
-Boruto, tu tendrás un regalo en tu cumpleaños. Hoy festejaremos a Kawaki-
-pero ya fuimos al lago-
-bueno, pero...-
-no deberías consentirlo tanto, es muy molesto y altanero-
-Boruto, ¿cómo te ves a ti mismo?-algo nervioso.
-soy un gran ninja, por supuesto. El mejor de todos-
-no me refería a eso-
-¿entonces?-
-sólo trata de ser más comprensivo con Kawaki, ¿sí?-
-realmente lo conscientes mucho-

Tras salir del bosque, Kawaki se dirigió al sendero que lleva a la aldea. No quería seguir entrenando con el Séptimo o mejor dicho no quería seguir hablando con el Séptimo.

Antes de vivir con los Uzumaki, cosas como un cumpleaños o un día de picnic, no existían, no eran importantes. Pero ahora que sabía que existían ese tipo de cosas, no quería acostumbrarse. No quería volver al lago, porque sí le llegaba a gustar compartir un día soleado, ¿qué pasaría cuándo esos días acaben?

El Séptimo seguramente no lo había hecho con mala intención. Por algo no le había preguntado cuándo era su cumpleaños y después de pasado un año, sólo asumió que ya había pasado y que probablemente no lo había mencionado porque no era importante o porque no conocía la fecha. Así de considerado era el Séptimo, por lo que nunca haría algo para lastimarlo.

-ah tu, ¿Naruto sigue entrenando?-
-ah, el sensei del idiota-murmurando.
-¿dijiste algo?-
-el Séptimo ha decidido tomar este día para descansar-diciendo esto, el chico se alejó del lugar.
-¡qué niño más problemático!-
-¡Sasuke-san!-
-¡hey Sasuke!-
-¿tomaras un día de descanso?-
-¿por qué lo haría?-
-por nada... escucha debemos hablar-
-¿ocurre algo Sasuke-san?-
-Boruto porque no te adelantas y buscas a Kawaki-
-nah, ese tipo me pone de malhumor-quejándose.
-sí, parece ser un verdadero problema-agregó el sensei de Boruto.
-vamos chicos, no sean tan duros con él-con su tono conciliador.
-por favor Naruto, el chico es un problema y lo sabes-
-Sasuke para-
-oye papá...-
-Boruto, ve a casa por favor-
-de acuerdo-

Apenas dijo esto, Boruto se alejó del lugar saltando entre la arboleda. Mientras lo hacía vio a Kawaki que se encontraba escondido. Sus miradas se cruzaron por un breve instante pero eso no le importó.

No se llevaban bien y eso no era un secreto para nadie. A decir verdad, muy pocas personas confiaban en Kawaki, sí no fuera por sus padres y Himawari, el chico siempre andaría sólo, porque nadie más se atrevía a hablarle. Incluso Sarada tenía cierto recelo del chico.

En cuanto a Kawaki, el parecía odiar a todos. Siempre malhumorado y hablando con un tono altanero de voz. Era muy molesto y nadie podía cruzar más de dos palabras con él pero quizás por su forma de ser, el único que podía sentarse a hablar con él y parecía ser escuchado, era su padre.

Kawaki ignoraba a todos a su alrededor pero para el Séptimo siempre tenía un momento. A decir verdad...

-ese idiota, sólo escucha a papá...-

Mientras Boruto intentaba comprender al huraño chico con el que debía convivir en contra de su voluntad, su maestro y padre discutían acaloradamente.

-en serio Naruto, no puedes ser tan idiota-
-Sasuke, comprendo lo que dices. Los Otsutsuki son un gran problema pero...-
-es la única solución-
-encontraremos otra-
-Naruto, ese chico es un recipiente viviente. Incluso Boruto podría llegar a ser un problema, pero el es tu hijo y...-
-ambos son importantes para mí y no pienso sacrificar a Kawaki para ganar un poco tiempo-
-todos estaremos en peligro-
-asumiré todos los riesgos-
-no debes hacerlo-
-sí obtenemos el fruto...-
-claro, dejar que Kawaki se convierta en un árbol divino y que Boruto lo devore, debe ser un chiste de mal gusto-
-tu hijo recuperará su humanidad e incluso podrá enfrentar a cualquier Otsutsuki-
-me cuesta creer que estés siquiera sugiriendo esto, Sasuke-
-es una opción. La otra opción sería simplemente separarlos-
-¿separarlos?-
-sí ese chico no estuviera aquí...-
-¡basta Sasuke!, esto no es propio de ti. Sacrificar a un niño...-
-¿niño?, ¿realmente lo ves como a un niño?-
-está bajo mi cuidado, así que lo consideraré como tal-
-Naruto, no comprendo como puedes poner a ese extraño por sobre la seguridad de la aldea. Incluso lo pones por sobre tu propio hijo... no comprendo por qué te comportas así-
-soy el Hokage y mi deber es proteger a todos-
-lo entiendo pero no eres capaz de ver que con sólo un sacrificio, evitaremos muchas pérdidas y sufrimiento-
-haré hasta lo imposible para que nadie salga herido o sufra-
-sí, lo harás, es lo que siempre haces-
-entonces, ¿cuál es el problema?-
-que sin importar que, al final, ese chico te traerá sólo sufrimiento-
-sí debe ser así, así será-
-puedes evitarlo-
-no pienso abandonarlo-
-¡idiota!, ¿podrías pensar más en ti mismo?, ¿en los que dependen de ti?-
-Sasuke, sí algo llegará a pasarme algún día, la aldea y cada habitante de Konoha, te tendría a ti para que los protejas- sonriendo.
-¿y yo a quién tendría?-tono bajo.
-¿qué?-
-prometeme que llegado el momento, dejarás a ese chico y te preocuparás de ti mismo-
-no puedo prometerte eso...-en tono serio.
-Naruto...-bajo.

Vacilando, Sasuke apoyo su mano en el rostro de Naruto y lo acarició.

-eres alguien muy importante para Konoha, no podemos perderte... yo no..-
-Sasuke, por favor ayuda a Boruto a entrenar- bajando la mano del hombre frente a él.
-¿qué?-
-iré a buscar a Kawaki y le pediré que entrene conmigo. Sí crees que estamos en peligro lo mejor es entrenar-
-claro-

Naruto se marchó lentamente, caminando y sin mirar atrás. Sasuke que sintió el chakra de Kawaki grito poco después:

-¡sal de ahí!-

Una bandada de aves salió volando y el joven aprovechó para retirarse sin ser detectado. Se marchó de allí pero no podía dejar de pensar en lo que escucho... "él le traería sólo sufrimiento al Séptimo".

La Distancia Entre NosotrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora