I Found You (Steve Harrington/Eddie Munson)

Capítulo 14

Steve y Reese tenían encargados cuidar de Mike, Lucas, Dustin y Max, lo que no era tan fácil como sonaba, pues los niños estaban enojados por no ayudar más con el plan y brindaban distintas ideas sobre cómo derrotar a los demodogos.

-Odio tener que preguntar esto, pero ¿qué demonios están haciendo ustedes dos? - Reese observó confundida a Steve cargando al cadáver del demodogo para meterlo en el refrigerador -No, por favor dime que eso no es...

-Es un descubrimiento científico, debemos preservar el cuerpo -indicó Dustin.

-Tú se lo explicarás a la señora Byers - aclaró Steve antes de cerrar la refrigeradora.

-No puedo creer que todos estén arriesgando sus vidas mientras nosotros somos tratados como tontos - se quejó Mike.

-Si el entrenador dicta una jugada no se discute, se hace - contestó Steve.

-Esto no es un estúpido juego, ni siquiera estamos jugando, estamos en el banco.

-Sí, me refiero a que ... Max, tú pareces la más racional de los cuatro y estoy seguro que sabes lo que quise decir ¿les ayudas a entender?

-No, yo también quiero escucharte, Steve, porque sonó a la definición exacta de estar en la banca.

-Bien, sí, estamos en la banca, no podemos hacer nada - exclamó el castaño frustrado.

-Bueno... no es totalmente cierto -intervino Reese obteniendo una mirada desaprobatoria de Steve - lo siento, pero ellos tienen algo de razón.

-Si distraemos a los demodogos podemos alejarlos del laboratorio y despejarle el camino a Eleven - propuso Dustin.

-Sí, suena excelente y después todos morimos - replicó Steve poniendo sus manos en las caderas- Escuchen, nos quedaremos en el banco y dejaremos que los demás hagan su trabajo.

-Le teme al fuego ¿verdad? Podemos quemar el centro y correr antes de que lleguen.

-¡Reese! ¿Acaso estás loca?

-Puede que sí, pero estoy harta de esos bastardos y quiero dejar de preocuparme y mantenernos a salvo. Así que tienes dos opciones, o vienes con nosotros o te quedas y obedeces a Nancy.

-Dios, la amo, en serio -comentó Max.

-No, nadie saldrá de aquí- negó Steve mirando a la castaña - si alguno de estos niños muere, tú y yo somos los que tendremos que responder por ello.

-Si no salimos de aquí todos podemos morir, es lo mismo, excepto que si salimos al menos tenemos más probabilidades de que el plan salga bien. ¿Por qué no hacemos una votación? Todos los que estén de acuerdo con salir levanten su mano - pidió Reese alzando su mano junto a Mike, Lucas, Dustin y Max - parece que somos mayoría.

-A veces eres realmente insoportable Henderson- masculló Steve - bien, iremos a arriesgar nuestras vidas. Me encanta.

El sonido de un auto acercándose a toda velocidad llamó la atención del grupo, observaron un auto azul metálico al frente. Max maldijo en voz baja espantada.

-Es Billy, si se da cuenta que estoy aquí va a matarme.

-Salgan de la ventana todos, yo me encargo- le dijo Reese, pero fue detenida por Steve.

-No cariño, yo me encargo.

-Le dijo cariño a mi hermana, es suficiente  - gritó Dustin espantado, Lucas golpeó su cabeza realizando un gesto de desconcierto - lo siento, mal momento. Después hablaremos seriamente, Reese.

Billy bajó de su auto con un cigarro en su boca, forzó una sonrisa arrogante al cruzarse con Steve, quien se acercó hacia él.

-¿Estoy soñando o eres tú, Harrington?