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Dejé todo limpio y volví a la sala de estar. —¿Qué estás haciendo?.

—¿No es obvio lo que estoy haciendo?.

—No.

Me miró mal y se levantó. —Le estoy colocando caricaturas animadas.

Rei mirando las princesas en la televisión y me senté en el sofá. —Esto es aburrido.

—Para nosotros, pero a ella parece gustarle. - se encogió de hombros quitando las almohadas alrededor de Danna sentándose a su lado. —Yo le hubiera puesto la fórmula uno.

Carcajeó. —Solo adáptate y ya. - miró la televisión.

Bufé mirando aburrido, pero no tardé mucho en sacar el celular para mirar un rato las redes sociales, así estuve por media hora hasta que escuche el pedido llegar. Me levanté y fui a recibir la comida, pague y le di un poco de propina, volví adentro dejando el pedido en la mesa.

—Traeré los platos.

Me di la vuelta para mirarlo.

—Se quedó dormida. - me dijo antes de que preguntara por mi prima. Asentí y lo vi ir hacia la cocina.

Al rato volvió con dos vasos y dos platos, sacó el pollo y lo sirvió al igual que la bebida. Me senté y él lo hizo frente a mí, esto seguía siendo incómodo, pero nada de otro mundo, según yo, no hay nada diferente entre nosotros, después de esto, todo volverá a la normalidad, aunque tal vez, si él no fuera como es, podría haber sido parte de mi grupo, después de todo la otra noche me di cuenta que no era tan diferente a mí en cuanto a locura, pero donde chocamos, es en la personalidad. Él es una persona competitiva, terca, ambiciosa y distraída, somos casi iguales, lo único diferente es que yo soy mucho más fuerte y terco que él, y no soy distraído.

Estábamos comiendo en silencio, pero una música sonó fuertemente provocando que nos miráramos confundidos por un segundo, era el tono de un celular, pero no el mío, era el de Howard.

—Dime. No, estoy solo. - me miró. Alce una ceja mientras él me miraba advirtiendo que no dijera nada. —Ya la vi, si, ya comí. ¿más tarde?, ¿por qué?. - frunció el ceño. —Bien, ten cuidado... ¡pero mamá!. - bufo. —Ya, si entendí, adiós. - corto.

—Así que... estás solo.

—No me causes más problemas. - blanqueó los ojos.

—Pero si no estoy haciendo nada, tú eres el perseguido.

—No es que sea perseguido, es ser cuidadoso.

—Es lo mismo.

—No, no es lo mismo.

—Drama, esa es la palabra que te describe.

Suspiró apuntándome con el cuchillo. —Vuelve a decir algo así y te lo entierro en los ojos.

—Que salvaje, aunque no debería extrañarme de tu raza.

Tenía la intención de levantarse, pero el llanto de un bebe interrumpió el ambiente. Él se levantó y subió las escaleras, miré su plato igual de lleno, no alcanzo a comer casi nada, remoje mis labios y termine de comer, luego levante los platos y los volví a lavar, cuando terminé volví a la sala creyendo que los vería estar en esta igual que antes, pero no estaban, subí las escaleras llegando al pasillo y entré a la habitación de Howard ya que estaba con la puerta abierta, pero solo me quede parado al medio mirando como él estaba en el suelo jugando con autos de juguete con mi prima, ni siquiera se había percatado de mi presencia.

—¡Ruun!. - dijo moviendo el control del auto mientras este giraba alrededor de mi prima mientras ella se reía.

Alce una ceja y me senté en el suelo al lado de ella quedando frente a Donghyuck quien me miró con indiferencia.

Fuego bajo la lluviaWhere stories live. Discover now