24- Se acabó.

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Yeimy

Pasé la noche sin dormir pensando en la discusión que habíamos tenido. Tenía claro que debía de disculparme con Charly, pero no sabía si querría verme, no después de mis palabras el día anterior.

Después de dar vueltas en mi cama por unos minutos por la pereza, me levanté. Pensaba en qué estaría haciendo Charly en este momento y... Aún era muy temprano así que seguramente estaría en su casa, probablemente aún durmiendo. Cuando terminé de prepararme para ir a Soul and Bass, me dirigí hacia las escaleras y mientras bajaba iba pensando si ir o no ir a disculparme.

- Buenos días señorita Yeimy - dijo el muchacho de seguridad.

Yeimy: - Buen día - sonreí mientras elevaba mi mano.

Me metí al carro y comencé a conducir pensativamente hacia mi trabajo.

Yeimy: - Yeimy, dejá el maldito orgullo y andá - me regañé a mi misma para luego desviar el rumbo y dirigirme hacia el apartamento de Charly.

Caminé a un paso rápido para adentrarme al edificio.

Yeimy: - Hola, buen día - sonreí al portero. - Hola, ¿Él señor Charly, se encuentra? - pregunté a recepción.

- No le sabría decir señora, recién llegué. El turno de la noche es de mi compañero - contestó algo apenado.

Yeimy: - No importa - dije tranquila. - ¿Puedo pasar? - señalé hacia los ascensores.

- Claro - sonrió. - El señor Charly, dejó claramente expreso que usted podía entrar cuando usted quisiera.

Yeimy: - Gracias - sonreí para luego subir hacia su piso.

Toqué la puerta esperando que me abriera pero no pasó. Miré hacia los lados esperando y volví a tocar pero no hubo respuesta alguna.

Yeimy: - ¡Charly! - grité aún con la esperanza de que esa puerta se abriera.

Apoyé la cabeza en la puerta mientras miraba hacia abajo, tal vez ya se había ido a Puro Flow o tal vez, simplemente no quería verme. Pero sabía que Charly, no era así, aunque estuviera molesto conmigo me hubiera abierto. Puse la mano en el pestillo para abrirla en forma sarcastica mientras soltaba un bufido de frustración, pero la sorpresa me invadió cuando si logré abrirla.

Fruncí el ceño mientras me adentraba por la puerta hacia la sala. No era normal que Charly, dejase la puerta sin seguro si no se encontraba allí. Comencé a caminar lentamente para ser cautelosa por si acaso.

Mi pecho se detuvo cuando al caminar hacia la sala me topé con una camisa y no de él presisamente, era de una vieja. Continué mi camino, siguiendo el resto de prendas que fui encontrandome tiradas en el piso. Una falda, la camisa de Charly, sus pantalones, hasta que alcancé la puerta de la habitación, la cual estaba entreabierta.

Al entrar hacia ella, los ojos se me llenaron de lágrimas al presenciar la imagen. Silvia, descansando en el pecho de Charly, este estaba boca arriba sumido en un sueño profundo mientras su brazo la rodeaba tal y como hacía conmigo después de hacer el amor.

Bajé la cabeza para que mi mirada conectara con el piso, era incapaz de creer que Charly hubiera hecho esto, pero qué más pruebas que verlos con mis propios ojos. Relamí mis labios y sonreí con ironía.

Yeimy: - Charly - dije con un tono duro, la verdad no sé como fui capaz de sostenerlo cuando en mi interior me estaba rompiendo.

Ninguno parecía tener reacción alguna ante mis palabras, así que fui hacia la cocina para coger un vaso con agua. Volví hacia la habitación y les tiré el agua sobre sus rostros haciendo que se despertaran rápidamente en reacción a mi acción, ambos se sentaron en la cama para después mirarse con sorpresa.

Porque esa ha sido nuestra suerteWhere stories live. Discover now