CAPÍTULO 86

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5:15 a.m.

Fueron 5 toques en aquella puerta los que hicieron a Jimin abrir sus ojos despertándose al fin aunque volvió a acomodarse al escuchar de nuevo otros toques.

Suspiró y sin esperar más caminó hasta la planta de abajo para así ir y abrir creyendo que su madre había salido olvidado las llaves pero, su confusión se hizo más grande al ver a Yoongi frente a él con... su mejilla bastante roja.

— ¿Q-qué pasó? ¿Por qué--

En ese momento sólo sintió cómo aquel alfa lo abrazaba mientras recargaba su cabeza sobre su hombro.

— Cariño...

— Ya no aguanto a ese idiota en mi casa... —susurró.

Jimin se separó por unos segundos para luego adentrarse junto con el adverso y así dirigirse hasta su habitación en dónde rápidamente tomó una de las sábanas en su cama para luego colocarla sobre los hombros de su novio quien no tenía más que una delgada camiseta.

— ¿Te volvió a lastimar? —frunció su entrecejo mientras observaba detenidamente el rostro de su novio quien no podía hacer contacto visual en esos momentos— Ese maldito, ¿qué hizo ahora? —Preguntó molesto.

— De nuevo estaban discutiendo... —musitó— cuando bajé... vi que él estaba a punto de golpearla así que la defendí, lo... eché de la casa, peleamos afuera y... mamá siempre me defendió a él —suspiró— ella me golpeó diciéndome que no me metiera en sus asuntos y que debería irme ya de la casa.

Jimin pudo sentir la rabia comenzar a invadirlo por completo. Sabía la situación en aquella familia y siempre estuvo rogando a su alfa que se fuera de ahí para que dejara de recibir esos tratos pero, se negaba. No quería vivir en la casa de su omega, tampoco quería mendigar dinero para poder pagar un departamento económico pero, lo que más le importaba era que... no podía dejar a su madre vivir sola con ese estúpido que sólo le hacía daño.

— Estoy seguro que hoy volverá con algo en manos y mamá lo perdonará pero, si llego yo... me reprochará todo lo que hice. —Musitó.

— Quédate aquí, quédate conmigo, ¿qué fue lo que dijimos la última vez? Tenemos... tenemos el dinero que estuvimos ahorrando, podemos pedir ese departamento que vimos por Internet y--

— No es tan fácil, Jimin... —Interrumpió— mi trabajo de medio tiempo no cubre ni... los gastos de nuestra comida. Tú dejaste de trabajar y... —suspiró de nuevo— no lo sé, no sé qué hacer.

— Buscaré trabajo de nuevo, podemos... ¿qué tal si le pedimos ayuda a Jungkook o al señor Kim? Ellos podrían--

— No quiero pedir dinero, no me gusta hacerlo y lo sabes. —Respondió un poco molesto.

El pelirrojo se quedó unos momentos en silencio para luego sentarse a su lado. Poco a poco llevó su mano hasta la de su alfa para luego entrelazar sus dedos dándose cuenta que de nuevo había comenzado a morderse las uñas.

— Yo sé que no te gusta... —musitó— pero, esta puede ser una excepción. No me gusta verte herido por ese imbécil casi... todos los días. —Habló mientras con su otra mano tomaba de la mejilla al pelimenta tratando de buscar su mirada—. Voy a sacarte de ahí, nos iremos a vivir juntos cómo lo planeamos estos últimos meses. —Sonrió—. Quiero que seas feliz cada dia de tu vida, no importa... si te da vergüenza pedir algo, yo lo haré, por ambos.

DON'T PLAY WITH THE TEACHER | OMEGAVERSE  +19Donde viven las historias. Descúbrelo ahora