M O K I T A [MoonSun]

Capítulo 24

Después de que la demás gente saliera del que ahora sería mi hogar me dispuse a explorar el mismo, tenía una cocina bien equipada, todo era de acero inoxidable, o bueno eso era lo que decía la etiqueta de la mayoría de electrodomésticos, tenía u baño bastante agradable y con olores muy agradables a pesar de todo, una pequeña sala y un diminuto cuarto de lavado y aseo, pero lo principal era el dormitorio, solo contaba con uno pero lo suficientemente grande para mí y para Hyejin, incluso... podrían haber vivido perfectamente la señora Ahn y mi madre.

Pero no es así ahora.

Había una increíble cama con unas sábanas muy lindas, era gigantesca para una sola persona, también había una pantalla mediana, un closet amplio, un par de taburetes, una mesa y un espejo de piso, lo que restaba era puro espacio limpio y alfombrado, ni si quiera sé cómo llenar el espacio que de por si estaba lleno ¿Cómo lo hare con el resto del departamento?

–Mira, ByulYi, hay un control para todo ¡Incluso para las luces! ¿Eso es normal acaso?

–Si te soy sincera no tengo idea, me siento como un bebé en estos momentos, no entiendo nada

–Pues habla por ti, esto es muy sencillo, mira...

Y así fue como Hwasa empezó a darme toda una clase sobre cómo usar los seis controles diferentes que tenemos ¿Cómo demonios ella aprendió tan rápido? ¿No tiene como 5 años para estar sabiendo toda esta cosa? Prácticamente, la ignore en todo su discurso, poco me interesaba como poner las luces de colores, así que me senté en la cama y poco después me recosté, cerrando los ojos y sintiendo lo bien que era una cama hecha a medida.

A mi madre le hubiese encantado dormir una siesta aquí.

Suspirando, al no querer tener un bajón en estos momentos, decidí reincorporarme y cortarle la plática apasionada a Hyejin.

–Oye, pequeña –Antes de que me dijera algo, seguí hablando– ¿Por qué no vas y estrenas el baño? Deberías darte una ducha si quieres ir al dichoso parque con Hani y Amber, recuerda que pasaran por aquí en dos horas, y tu tardas demasiado bañándote para el pedazo de gente que eres

– ¿Quieres deshacerte de mí?

– ¿Qué? ¡No! ¡Ay, como eres dramática! –la atraje hacia a mí, recostándonos las dos en la enorme cama– En estos momentos, no tengo a nadie más aquí, jamás podría hacer algo para separarme de ti, confía en eso ¿Entendido?

–Sí, ByulYi, te quiero mucho –se abrazó a mi

–Y yo a ti... pequeña –dije riendo

– ¡Que no me digas pequeña!

–Lárgate a bañar antes de que te agarre a patadas

Y con juegos hice que se fuera al baño a asearse. No paso mucho rato y sentí que necesitaba distraer mi mente, nunca estuve acostumbrada a holgazanear, o bueno no estando en un lugar como aquel, siempre había algo que hacer y no sé si estoy preparada para que mi rutina también empiece a cambiar, comencé a revisar más el lugar y fui haciendo una lista de todo lo que faltaba o íbamos a necesitar, Hani había dicho que cerca de aquí habían supermercados y plazas, no me vendría mal ir por algunas cosas en lo que Hwasa disfrutaba en el parque, yo no tenía muchas ganas de reunirme con mi infancia así que prefiero no quedarme ahí.

Después de un rato, Hyejin salió de bañarse y como apenas acabábamos de llegar decidió usar la misma ropa con la que llego, viejo habito que al parecer no cambiara en nosotras, creí que ahora mi turno de asearme y así fue, deje a Hwasa en la habitación con la televisión prendida y yo solo senti tranquilidad cuando el agua helada recorrió cada parte de mi ser, senti como me destensaba a medida que las gotas iban bajando por mi cuerpo, no tarde mucho y a los cinco minutos salí igual con la misma vestimenta.

Tan puntuales como siempre, ya se encontraban tocando la puerta.

–Bien ¿Ya están listas? Vámonos ya –Entro bastante apurada Amber, casi sin esperar a Hani quien venía detrás de ellas

– ¿Y a esta que le pico?

–Nada en realidad, solo recibió una llamada que la puso alegre –me respondió Hani sonriendo cálidamente

–Sí, y es mejor que nos demos prisa, ya deben haber llegado –Y tal cual como entro, salió

–Esta algo ansiosa ¿ya están listas?

–Ya casi solo estoy esperando a...

–Listo, vámonos –Salió Hwasa del cuarto y después del departamento sin mirar atrás

–A nadie, larguémonos –Tome las llaves y salí del lugar junto con Hani

Ya en camino decidimos irnos en carro, aunque el parque en si estaba muy cerca pero gracias a la desesperación de alguien decidimos gastar gasolina, ni si quiera entiendo que la tiene así, solo se la vive diciendo que ya va tarde y que "ya deben estar ahí", ni maldita idea de quienes pero pienso seriamente que ya se está volviendo loquita.

Pero al final, llegamos.

Prácticamente salió disparada del vehículo el cual cabe recalcar ni si quiera se había estacionado bien, después y casi con su misma velocidad salió también Hwasa, alarmada le seguí yo tras los pasos de esas dos locas, juro que harán que me explote una vena, y con mucho apuro Hani siguió nuestros pasos unos más atrás.

– ¡Oye, Hani! ¡¿Dónde dijiste que estaban?! –Gritó Amber una vez se detuvo en medio del parque

– ¡Nunca te lo dije, imbécil! –Nos alcanzó Hani bastante agitada

–Bueno... ¡Pues dime! –Hani y yo la miramos con muy mala cara pero al final ni lo noto

–En el kiosco, Liu

Y así fue como las cuatro fuimos hasta el dichoso kiosco que se encontraba a tan solo unos pasos más adelante.

Cuando llegamos, rápidamente subimos y solo había una... ¿mujer?

–Vaya, por fin llegaron –Dijo la desconocida una vez quito su vista del celular y nos vio

–Yo también te extrañe –Hani quien iba de ultima ahora se nos adelantaba unos pasos y casi que corrió para llegar hasta la mujer para estrecharla en un fuerte abrazo y después... ¡¿En un beso?!

–Obvio que te extrañe, cariño –Amber se aclaró la garganta para romper la burbuja en la que estas dos se habían sumergido en cuestión de segundos, cosa que agradecí– ¡Es cierto! Disculpen mis modales –Hizo una reverencia, separándose un poco de Hani

–Chicas les presento a Hyojin, mi esposa

–Un placer –Dije más procesada

–Hola, soy Hyejin, nuestros nombres se parecen

–Y déjame agregar que ella también es Ahn –Mencionó Hani

–Sí, sí, sí, que bonito todo pero ¿Dónde está?

–Uhm, te juro que estaba aquí hace unos segundos –hablo Hyojin mirando a todos lados buscando algo o más bien alguien ¿Todavía faltan más? – ¡Mira allá esta!

Las cuatro miramos hacia donde señalaba la esposa de Hani y efectivamente, había una chica, más bien adolescente que se encontraba en el parque de skate en la parte inferior, vestía con ropa deportiva fluorescente por lo cual no era fácil de pasar desapercibida.

Todo estaba bien hasta que vimos cómo la misma chica tomaba una patineta y la levanta queriendo golpear a un chico con ella.

Carajo.