ESCLAVO DE LA SOMBRA

Capítulo 41 La fuerza en los números

Sunny estaba tirada en el barro, mirando al cielo. Ni siquiera tuvo que recuperar el aliento ya que toda la pelea tomó menos de diez segundos de principio a fin. Nadie estaba muerto, herido o magullado... bueno, con la excepción del carroñero. Estaba completamente fuera de sus expectativas.

Miró el cadáver del monstruo para asegurarse de que realmente estaba muerto, luego invocó las runas y miró la cantidad de fragmentos de sombra que tenía en su poder.

[Fragmentos de sombra: 16/1000].

En realidad era cierto. La poderosa bestia despierta pereció así. Y, aunque Nephis hizo la mayor parte del trabajo, fue él quien asestó el golpe mortal.

¿Por qué no puede ser siempre tan fácil?

Sunny se puso de pie y descartó Azure Blade. Entonces, recordó las palabras que el Maestro Jet le había dicho una vez: "Nadie puede sobrevivir solo en el Reino de los Sueños".

En ese entonces, tomó nota de su consejo, pero realmente no lo creyó. Después de todo, siempre se había esforzado por ser autosuficiente, sin permitirse depender de nadie. En la mente de Sunny, este era el verdadero significado de la fuerza.

Sin embargo, ahora comenzaba a sospechar que esta lógica era defectuosa. De hecho, tener a alguien con quien compartir tus cargas significaba la diferencia entre el cielo y el infierno aquí en el Reino de los Sueños. Si estuviera solo, luchar contra un solo carroñero podría haber sido su final.

Del mismo modo, a pesar de que Nephis era mucho más hábil que Sunny, habría sido extremadamente difícil para ella derrotar al monstruo acorazado sola, ya que su punto más débil estaba fuera de su alcance.

Pero juntos, lo habían logrado con relativa facilidad. El todo era mayor que la suma de las partes. En otras palabras, había fuerza en los números que superaba el poder individual. En ese sentido, poder depender de un grupo no era un signo de debilidad, sino, por el contrario, una faceta importante de fortaleza personal.

Los lobos solitarios siempre estarían en desventaja. Esa fue otra lección que aprender.

'No es como si tuviera muchas opciones.'

Se acercó a Nephis y verificó si estaba bien. Aparte del ligero daño a su ropa improvisada de algas, todo parecía estar bien. Miró a Sunny.

"¿Memoria?"

Sacudió la cabeza.

Nefis suspiró. Parecía que estaba un poco impaciente por conseguir su propia armadura. Si Sunny fuera un caballero, le habría sugerido prestarle el Sudario del titiritero por un tiempo... pero, por desgracia, no lo era. Esa armadura era extremadamente valiosa y le había costado mucho.

Además, a diferencia de Changing Star, la imagen de Sunny usando nada más que un taparrabos de algas habría sido más perturbadora que estéticamente agradable. Entonces, no dijo nada.

Mientras tanto, Nephis se dirigió hacia el carroñero muerto y dijo sin volver la cabeza:

"Trae a Cassie".

Con un suspiro, Sunny se dio la vuelta y salió del claro.

Pronto, se acercó al lugar donde la niña ciega esperaba pacientemente su regreso. Al escuchar sus pasos, se estremeció y levantó la cabeza:

"¿S-Sunny?"

'¿Cómo me reconoció? Ah... debe ser mi forma de caminar.

"Sí, soy yo. Todo ha terminado. Vamos, te llevaré a Nephis".