La mano derecha de Prime

Cap 2: los vendedores de Bumblebee

Renee

─Bueno Bumblebee, hoy vamos a recoger a Ryu y a ver a esas personas que te "vendieron" ─dije con las llaves en la mano entrando al vehículo─. Sabes como llegar ¿verdad?

─Claro que se llegar ─dijo a través de la radio─. Si me llevaron de ese lugar sé como llegar de nuevo.

─Lo único que espero es que Ryu no se asuste cuando os vea a todos y que existen robots de otro planeta que se pueden transformar en vehículos

─Estoy casi seguro de que se asustara, ¿cuanto? Eso si que no lo se.

─Ya ─me apoyé sobre el volante pensando en todos los escenarios posibles sobre como podría reaccionar Ryu ante tal cosa como saber la existencia de unos robots venidos de otro planeta que no está en nuestro sistema solar.

─Escucha, sé que no soy el más indicado para decir esto pero no te preocupes seguro que de alguna manera lo entenderá.

─Quizá tengas razón que yo sepa Ryu es una persona que no suele juzgar de primeras

─Bueno ¿vamos a buscar a tu amigo o como lo hacemos?

─Es verdad vamos a por Ryu y ya directamente nos llevas a ese lugar de donde te recogió ayer por la mañana ─fuimos a la casa de Ryu quién sorprendentemente estaba esperando en la entrada.

─Ya era hora ─dijo entrando al coche, no quería decirle todavía que el coche en el que estamos es en realidad un robot que se puede transformar─. Bueno, ¿a donde vamos? ─preguntó mientras se ponía el cinturón de seguridad.

─Ahora lo verás ─Bee nos condujo al lugar donde supuestamente le habían vendido.

─Este lugar me suena.

─Claro que te suena.

─Hombre Bumblebee, has vuelto pensabamos que no te volveríamos a ver ─dijo mientras bajábamos del coche y nos acercábamos a él.

─¿Bumblebee? ¿Quién es Bumblebee?

─Mira detrás de ti zoquete ─así como pedí se dio la vuelta y vio la verdadera forma del coche que me dio ayer.

─¿Este es el coche que te di ayer?

─Sí, ese es el coche que me diste ayer como regalo.

─Que sepas Cade, que yo no he venido realmente a haceros una visita, he venido porque necesito de vuestra ayuda.

─¿A qué te refieres Bee?

─Es probable que los Decepticons vengan a la Tierra en busca de algo importante para ellos, algo como el cubo que llegó aquí hace años.

─Sin Optimus no podemos hacer nada ─dijo un autobot de color rojo con un acento bastante fuerte.

─Sin Optimus podemos demostrar que podemos salvar la Tierra sin su ayuda Mirage.

─Nunca serás un líder como Optimus.

─No necesito de Optimus para saber cual es mi posición en este grupo Mirage.

─¿Y cuál es tu posición en este grupo Bee?

─Mano derecha de Prime y segundo al mando, así que ten un poco de respeto por tu superior que solo porque sea más bajo que todos vosotros no significa que tengáis que denigrar al general de este equipo.

─Tú ni siquiera podrías vencer a Optimus.

─No podré vencerle solo porque él sea un Prime y yo solo sea un autobot como todos aquí presentes, pero yo también sé dar una batalla, ¿o es que ya te olvidaste de todas las veces que vencí a Decepticons que me duplicaban o triplicaban la altura? Al parecer la memoria ya te esta fallando demasiado y que os quede claro yo siempre fui el mejor de sus soldados entre todos los del equipo, no por nada soy el segundo al mando y general, yo nunca he retrocedido a la hora de luchar contra rivales que eran mucho más grandes que yo.

─Bee tranquilízate.

─No, estoy harto y estoy cansado que me traten como el débil del grupo cuando realmente no lo soy para nada, y tú lo sabes Cade, tú lo sabes pero no lo quieres admitir, solo porque soy el más pequeño de este equipo tengo que ser el más débil de todos, pues ya estoy harto de que se tenga ese pensamiento de mi ser ─se fue a un lugar apartado de todos intentando calmarse.

─¿Cómo podéis tratar a Bumblebee de esa forma? Él siendo el segundo al cargo y soportando tremendas humillaciones por parte de vosotros, ¿es que acaso los autobots no tenéis vergüenza alguna? Optimus estaría totalmente decepcionado del trato que esta recibiendo su mejor soldado por parte del resto del grupo, además ¿qué tiene de malo ser pequeño? Apuesto lo que queráis a que Bumblebee puede hacer mucho más siendo pequeño que todos vosotros siendo así de grandes, de verdad a veces dais asco creo que ni necesitáis la ayuda de Bumblebee ─fui tras Bumblebee llamándole intentando alcanzarle─. ¡¡Bumblebee!! ¡¡Bumblebee espera!! ─cuando se sentó junto a unos montículos de tierra y al fin le pude alcanzar intenté que de alguna manera pudiera hablar con él─. ¡¡Bee, escucha!! ─milagrosamente capté su atención haciendo que mirará a donde yo estaba─. Oye estoy segura de que tú puedes hacer mucho más de lo que ellos creen, no les hagas caso ellos solo están celosos de que seas la mano derecha de Prime aparte, seguro que puedes hacer muchas más cosas por ser pequeño que ellos siendo así de grandes eso te lo puedo asegurar.

─Estoy demasiado cansado de escuchar como se burlan de mí solo por ser el pequeño del equipo, siempre me han creído el débil por ser el más pequeño.

─Escucha ─me subí como pude a uno de los tantos montículos para verle mejor─. Yo creo en ti Bumblebee, la verdad es que los demás para mí no serían lo que son hoy en día sin ti, al no estar Optimus tú tuviste que coger el cargo y se ve que eso no lo aprecian para nada, pero tranquilo yo confío plenamente en ti, confío en que podrás hacer muchísimo más de lo que ellos creen, enséñales lo que puedes hacer, porque tienes un gran potencial, lo malo es que no quieren ver ese gran potencial que tienes Bee.

─¿De verdad crees en mí?

─Claro que si Bee, claro que creo en ti, eres un gran autobot aún siendo de menor tamaño que el resto, tú puedes hacer muchas más cosas siendo así de pequeño que ellos siendo así de grandes además como bien dices eres el segundo al mando y general del equipo, no te preocupes por el resto ¿vale? ─Bumblebee asintió ligeramente y ahí nos quedamos hablando dándonos totalmente igual el resto del equipo hasta que empezó a anochecer y Bumblebee obviamente se prestó voluntario para dejar a Ryu en su casa para irnos a la mía─. Muchas gracias Bee ─deje un beso sobre el capo y Bee aún tenía las luces encendidas, llegué a la puerta de mi casa y me giré para ver a Bumblebee─. Venga Bee, a dormir ─apagó los faros y por fin entré a la casa.