La mano derecha de Prime

Cap 50: la gloria de los autobots

Renee

─¡Ryu! ─le llamé entusiasmada bajando las escaleras corriendo y una vez abajo me lo encontré en la cocina por lo que me lancé a su cuello abrazándole con fuerza. Hace ya un par de días que me encontraba mucho mejor y con más fuerzas que cuando volvimos de Cybertron gracias a los cuidados de Ryu─ muchas gracias por cuidarme todo este tiempo Ryu.

─No hay de que, sabes que siempre te cuidaré enana ─pasó una mano por mi pelo enredándolo ligeramente y dejó un beso en mi frente─ sabes perfectamente que haría todo lo que este en mi mano para ayudarte ─puso la mano detrás de mi cabeza y me acercó más a él haciendo que esta vez pasara mis brazos alrededor de su cintura─ y jamás dejaré de ser ese amigo que te trata de la mejor manera posible.

─De verdad Ryu mira que a veces eres bobo ─Ryu sabía perfectamente como hacerme reír de alguna y otra manera, siempre lo conseguía, y ahora no iba a ser la excepción.

─Igualmente me quieres Renee ─puso ambas manos en mis mejillas y las acarició lentamente con los pulgares mientras me miraba fijamente a los ojos.

─Claro que te quiero Ryu, has sido mi amigo desde la universidad y me has estado cuidando desde entonces, y realmente me alegro de que eso siga así.

─Por supuesto que va a seguir así ─me abrazó con fuerza dejando un beso en mi coronilla─ no te voy a dejar tirada así como así, hemos pasado demasiadas cosas juntos para dejarlo de esta manera tan estrepitosa ─eso me hizo sonreír de nuevo mientras le miraba directamente a los ojos.

─Espero que podamos ir a Cybertron para ver al resto de los autobots, realmente les extraño ─dije con total sinceridad sin separarme de él.

─Yo también lo espero, yo también los extraño, mucho ─me empezó a besar toda la cara haciéndome reír colocando las manos otra vez en mis mejillas.

─Realmente te gusta hacer eso ¿verdad? ─pregunté entre risas mientras me miraba a los ojos.

─Sabes que sí Renee, y desde la universidad tengo demasiadas ganas de besarte y de no soltarte jamás. Y me da igual si la gente nos ve besándonos, incluso me gustaría que nos vieran hacerlo ─me volvió a acariciar las mejillas con las pulgares sin apartar la mirada de la mía. No sabía que responder a eso, simplemente me había dejado sin palabras─ pero tampoco tienes que corresponder a mis sentimientos si no quieres ¿de acuerdo?

─Ryu, no es que no corresponda a tus sentimientos, lo hago pero es que todavía estoy muy confusa, llevo confusa desde que nos conocimos en la universidad.

─Podemos aclarar esos sentimientos confusos ─acercó su cara un poco más a la mía hasta que nuestros labios se rozaron─ solo si tú quieres hacerlo claro ─luego de unos segundos de pensarlo asentí ligeramente haciendo que sonriera y presionara sus labios contra los míos en un suave beso el cual correspondí gratamente. Estuve esperando este momento desde que acabamos la universidad y empezamos a trabajar en la empresa en la que estábamos ahora. Cuando se separó de mí esa sonrisa seguía en sus labios─ gracias ─dijo en un susurro cerca de mis labios.

─No tienes porque agradecerme nada Ryu, ambos hemos acordado este beso ¿no? ─asintió ligeramente─ Entonces no tienes nada que agradecerme, somos amigos Ryu y realmente no me importaba besarte.

─Entonces podría haberte besado hace tiempo, ambos sabemos que nos gustamos desde la universidad, y creo que esta situación solo hizo que nos acercáramos aun más, pero la verdad es que tampoco me quejo demasiado y estoy casi seguro de que tú tampoco te hubieras quejado mucho.

─En parte tienes razón, es verdad que ambos nos gustamos desde la universidad pero la parte en donde me podrías haber besado hace tiempo no creo que sea del todo cierta, ambos éramos demasiado tímidos en aquel entonces por lo que no nos dijimos nada seguramente por el típico miedo de perder la amistad que teníamos y seguimos teniendo a día de hoy ─pasé los brazos alrededor de su cuello haciendo que su sonrisa se expandiera aún más.

─Pero ahora me surge una duda, si Cybertron actualmente esta parcialmente unido a la Tierra, ¿eso no quiere decir que cualquier posible amenaza restante allí podría venir aquí?

─No creo, Optimus y el resto se encargan de ese tipo de cosas, no por nada decidieron quedarse en Cybertron.

─Pero ¿qué hay de Bumblebee?

─Supongo que Bumblebee se quedara aquí hasta que reciba una orden directa de Optimus, no tendrá que preocuparse demasiado ahora mismo, al fin y al cabo es uno de los que más contribuyeron directamente a la hora de salvar a la Tierra, los humanos deberían estar agradecidos de que la Tierra no haya sido destruida y absorbida por un planeta aun mayor. Hemos tenido mucha suerte de que no hubiera pasado a mayores Ryu, si nosotros con los militares y el resto no nos hubiéramos metido en este embrollo, no hubiéramos logrado absolutamente nada de lo que hemos conseguido.

─¿Respeto? ─preguntó a lo que yo me reí ligeramente.

─No del todo, a lo que me refería era a que seguiremos teniendo un planeta en el que vivir aún sabiendo que ahora esta conectado a otro de una manera bastante...artificial a mi parecer.

─Vale, en eso tienes razón, lo admito. Pero aun me asusta el hecho de que aún puede haber más criaturas como esas en Cybertron y que Optimus y el resto no puedan erradicarlas todas de una sola vez y desde la raíz.

─Lo lograrán solo tienes que confían un poco más en ellos Ryu, aunque estén en otro planeta siguen siendo nuestros amigos, robóticos, pero amigos al fin y al cabo ─le bese de nuevo y le deje ahí para que volviera a hacer sus cosas mientras yo salí al jardín acercándome a Bumblebee─ entonces te quedas ¿eh? ─pregunté con una gran sonrisa de oreja a oreja.

─Sí, os tengo a vosotros aquí y no quiero separarme de vosotros tan rápido ─dijo con sinceridad a través de la radio.

─Oh, que dulce de tu parte Bee agradecemos que te quedes con nosotros después de lo que pasó en Cybertron.

─No os iba a dejar solos así como así, todos hemos pasado por mucho en estos últimos meses vosotros más que nosotros, por lo que de alguna manera os lo queremos compensar, también sabemos que el trauma psicológico no es ninguna broma y algo que no se debe pasar por alto.

─Muchas gracias por tenerlo en cuenta, de verdad, muchas gracias ─nos quedamos unos minutos en silencio hasta que empezó a anochecer y el ambiente empezó a ser más fresco pero sin llegar a que sea completamente frío.