Una chica nueva llega al mistorioso pueblo de Alivil, Vermont tras ser adoptada por su madrina. Ramona Wang se instalará en lo que sera su nueva vida lejos de su lugar de origen. A pesar de ser introvertida y un poco torpe no se le hace díficil hace...
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6 de Julio, 2005
¿Qué tan difícil es matar a un animal? ¿Piensa como nosotros? Adriel podía manipular ver como mataban a las reses, cerdos y pollos, los veía desangrarse y ver cómo su vida se iba; sacarle las entrañas y manipular su corazón, pero había algo que no podía hacer... matar con sus propias manos. Se encontraba frente al cerdo que lo veía como si fueran amigos, tenía ojos sangrantes. Era un luchador, el animal no quería subir a la camioneta, Adriel supuso que el cerdo presentía su propia muerte y que sabía a dónde iría si subía. Su padre tuvo que picarle los ojos para debilitarla y así hacer el trabajo más sencillo.
Toda su vida ha trabajado en la carnicería de la familia, pero nunca antes había matado a un animal. Su padre pensó que ya era tiempo de que diera el primer paso. Su padre tenia al cerdo acostado de lado con ayuda de su tío Stu.
—Ya hazlo, Adriel. Me sacas de mis cabales—le advierte su padre viendo como las manos de su hijo temblaban.
Tenía la cara seria, pero no podía mantenerse tranquilo por completo. Estaba aterrado.
—Ya déjalo, Jack...—quiso defenderlo su tío, pero eso solo provocó los gritos de Jack.
—A su edad yo ya ayudaba a mi padre en el matadero, tú eres testigo de eso...
—Él no eres tu. Es diferente, es más sensible.
—Es un marica, es lo que es...
—¿Pueden dejar de hablar de mí como si no estuviera aquí?—dice Adriel haciéndolos callar. —...Por favor.
—¿Quieres que deje de creer que eres una maldita princesa? Si eso quieres, apuñala al maldito cerdo, estamos perdiendo mucho tiempo—Adriel toma bien el puñal y ve el cuello del cerdo.
Había muchas maneras de matarlos. La familia Dahmer prefería desangrar el animal, pero era un proceso lento, no era una muerte rápida, algunas veces tardaba mas de un día en que el cerdo se desangre por completo.
Con manos temblorosas se acerca miedoso. Cuando la punta toca al cerdo este comienza a chillar haciendo que se aleje de él.
—¡Mierda, Adriel! Mátalo ya— el grito hizo que su mano se abriera y dejara caer el puñal al suelo. —¡Se un put-...! ¡Stuart!
Jack no pudo evitar que su hermano tomara el puñal y se lo clavara al cerdo para que comenzara a sacar la sangre.
↓ ↓ ↓
El camino a casa fue tan silencioso que podía escuchar su propio corazón latir. Esperaba más gritos de su padre, o al menos un golpe. Tenía problemas muy severos de ira, pero esta vez no estaba dispuesto a gastar más saliva en él. Ve con paciencia los pinos que indicaba que estaba llegando a casa, vivían en una pequeña granja donde criaban a los cerdos, vacas y pollos... olía mal todo el tiempo y estar en esa casa lo enfermaba, pero no podía escapar, su familia era lo único que tenía a pesar de que son unos monstruos sin corazón.
